Las bellísimas fotografías que captura la fotógrafa Victoria Zabrodina resultan cautivantes por ser minimalistas, poderosas y bastante poéticas.
La fascinante propuesta de esta artista originaria se distingue por presentar a hermosas mujeres solitarias que, a menudo, se esconden o miran hacia otro lado de la cámara, como si evitaran a toda costa establecer contacto visual con los espectadores.
De una sofisticada forma, a través de coloridas y oníricas escenas, las fotografías de Victoria Zabrodina resaltan la belleza del cuerpo femenino.
El proceso creativo de este fotógrafa comienza al crear un tablero conformado por notas e imágenes, de muy diversos temas, para así poder dar orden a sus ideas y realmente saber qué quiere presentar en cada escena.
Lo anterior facilita (y bastante) la elección de las paletas de colores, las modelos, las poses, los accesorios y el escenario que este artista busca plasmar.
Resulta sumamente interesante que Victoria Zabrodina primero puede pensar en transmitir un mensaje y a partir de eso es que decide construir sus imágenes, pero que también pueda crear imágenes sin ningún trasfondo, por lo que simplemente les da rienda suelta a sus ideas a partir de un estado de ánimo.
Básicamente lo que hace la también directora de arte es que juega con los sueños, los simbolismos y se entrega por completo a la intuición de sus modelos.
De una forma sumamente mágica e inexplicable, Victoria Zabrodina logra capturar las emociones más puras de las personas a través de su lente.