Jaime Sabines, es quizá uno de los poetas más destacados de México, debido a su escritura franca e intensa.
Nacido el 25 de marzo de 1926 en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, su padre fue Julio Sabines, quien le inculcó un profundo amor por las letras.
Sabines, estudió medicina durante tres años, pero se dio cuenta que ese no era su mundo.
Así, ingresó a la carrera de Lengua y literatura española en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional Autónoma de México.
En 1953, Jaime Sabines contrajo matrimonio con Josefa 'Chepita' Rodríguez Zebadúa, con quien tuvo cuatro hijos: Julio, Julieta, Judith y Jazmín.
Trayectoria literaria
Pronto fue reconocido por su talento, la gente comenzó a aproximarse a sus piezas, mismas que fueron traducida a varias lenguas, lo cual le valió resonancia internacional.
Es un exponente difícil de clasificar, su estilo es único, aunque se distingue por la intensidad, honestidad y expresividad que constantemente manejó.
Transparente, utilizaba un lenguaje cotidiano y espontáneo, muchos consideran que tiene un ritmo conversacional, casi confesional.
La informalidad lo acercó a los lectores quienes disfrutan enormemente de sus brillantes textos.
El amor y humor fueron temas frecuentes en su trayectoria. Su vida y obra se mantuvieron estrechamente relacionadas, con rumbo hacia una misma dirección.
La estética y ética que poseía siempre fueron congruentes en Jaime Sabines.
Entre sus libros más destacados están: Horal (1950), Tarumba (1956) y Algo sobre la muerte del mayor Sabines (1973).
Falleció en la Ciudad de México el 19 de marzo de 1999, no sin antes dejar un legado fundamental en la literatura universal.
Los amorosos callan.
El amor es el silencio más fino,
el más tembloroso, el más insoportable.
Los amorosos buscan,
los amorosos son los que abandonan,
son los que cambian, los que olvidan.
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