Los poemas de amor de Sor Juana a la Virreina María Luisa Manrique

17 de Abril de 2019 a las 14:42 hrs.


Los poemas de amor de Sor Juana a la Virreina María Luisa Manrique


Este 17 de abril se conmemora el 324 aniversario luctuoso de Sor Juana Inés de la Cruz. La mujer que se vistió de hombre para tener acceso a la educación y a las letras.

Aquella que se convirtió en la máxima exponente de la literatura hispanoamericana del siglo XVII.

Además, la última gran poeta de los Siglos de Oro en español

Estudiosos y empedernidos de Sor Juana, como Octavio Paz, aseguran que muchos de sus poemas son cartas de amor hacia la virreina.

Se estima que nació entre 1648 y 1651, en San Miguel Nepantla, un pueblito del Valle De México.

Era hija de Isabel Ramírez de Santillana y Pedro Manuel de Asbaje y Vargas Machuca. Sor Juana aprendió a leer y a escribir desde temprana edad.

Letras tempranas

 

De niña frecuentaba textos teológicos y grecolatinos clásicos. A los ocho, escribió una eucarística. Más tarde ingresó a la orden de las Carmelitas, pero no pudo tolerar su ideología rígida y hermética.

Por este motivo, se cambió a la orden de las Jerónimas, donde fungió como administradora del convento.

Durante su vida como religiosa escribió textos literarios. Además, villancicos y obras religiosas, hasta epístolas y sonetos.

Si bien varios de sus textos eran por encargos, también realizaba varios por gusto propio. Tal fue el caso de sus poemas.

Poemas a Lysi

 

Octavio Paz, aseguró que las cartas y poemas de amor que Sor Juana escribió, estaban dirigidos a la virreina María Luisa Manrique de Lara y Gonzaga.

La relación entre Sor Juana y Lysi, como la escritora llamaba a la virreina, coincidió con la época más prolífica de la poetisa.

María Luisa llegó a la Nueva España en 1680, de la mano de su esposo, el entonces designado virrey Antonio de la Cerda.

En ese momento, Sor Juana era conocida y reconocida por su talento literario. María Luisa conocía su obra y la admiraba.

Quienes han estudiado la obra de Sor Juana creen que su romance nunca se consumó.

Entre los votos de castidad de la monja y la jerarquía de María Luisa Gonzaga, parecía complicada una relación amorosa.
Sin embargo, Sor Juana se inspiró y escribió por ella y para ella. Una relación homosexual entre ambas habría significado un gran escándalo.

Curioso serulta saber que Juana de Asbaje se convirtió en monja para evitar que la casaran y pasar su vida atendiendo a un marido e hijos.

Aunque estaba consagrada a Dios y al aprendizaje, la llegada de la virreina a la vida de Sor Juana supuso un cambio en sus creencias. También, pudo representarle una forma de amar.

Aunque la relación entre ambas se cortó de manera abrupta en 1686. Esto ocurrió porque el Rey de España ordenó el regreso de Antonio de la Cerda.

Lysi se llevó con ella y conservó hasta su muerte un retrato de Sor Juana y un anillo que la monja le regaló.

La vida de Juana Inés de Asbaje y Ramírez de Santillana terminó a causa de una tifoidea el 17 de abril de 1695 en el Convento de San Jerónimo.

Aquí, un fragmento de poemas escritos para Lysi:

Pues desde el dichoso día

Que vuestra belleza vi,

Tal del todo me rendí,

Que no me quedó acción mía.

Con lo cual, señora, muestro,

Y a decir mi amor se atreve,

Que nadie pagaros debe,

Que vos honréis lo que es vuestro.

Yo adoro a Lisi, pero no pretendo

Que Lisi corresponda mi fineza,

Pues si juzgo posible su belleza,

A su decoro y mi aprehensión ofendo.