El diseñador español Paco Rabanne murió a los 88 años en su casa de Portsall en Finisterre, Francia.
"La Casa de Paco Rabanne desea rendir homenaje a nuestro visionario diseñador y fundador, que falleció hoy a la edad de 88 años", informó la casa diseñadora en redes sociales.
"Entre las figuras de la moda más influyentes del siglo XX, su legado seguirá siendo una fuente constante de inspiración. Estamos agradecidos con Monsieur Rabanne por establecer nuestra herencia de vanguardia y definir un futuro de posibilidades ilimitadas".
El diseñador, perfumista y también empresario, Rabanne era el único superviviente a una generación que cambió la moda para siempre.
Francisco Rabaneda y Cuervo, su verdadero nombre, nació el 18 de febrero de 1934 en Pasaia, en la provincia de Guipuscoa en el País Vasco español.
Desde muy pequeño (1939 para ser exactos) se trasladó a Brest, Francia con su familia, donde lo buscó la Gestapo en plena ocupación nazi. Vivió allí hasta 1947, donde empezó a crear un emporio que lo llevó a revolucionar la moda.
Rabanne fue galardonado con el Premio Nacional de Diseño de Moda en el año 2010 por "su innovación y su aportación a todos los ámbitos de la cultura del siglo XX".
Es hijo de un general andaluz leal a la República llamado Francisco Rabaneda Postigo, quien fue fusilado en Santoña (Cantabria) en 1937. Su madre era vasca y fue militante y miembro de la dirección del Partido Comunista de España (PCE).
No fue hasta los cinco años cuando Rabanne se mudó con su familia a Francia. Tras instalarse en París, estudió Arquitectura en la Escuela Nacional Superior de Bellas Artes. Se introdujo rápidamente en el mundo de la moda debido a que su madre había trabajado en el taller del modisto Balenciaga en San Sebastián.
Françoise Hardy y Salvador Dali vestidos en Paco Rabanne. Foto: Vogue
Al principio diseñó accesorios para modistos como Givenchy, Balenciaga o Dior. En 1963 presentó su primera colección de trajes, en la que mezcló materiales como el plástico, el papel o el aluminio. A partir de entonces, creó un imperio en el mundo de la moda, que abarcó desde la alta costura, la confección y los perfumes hasta los elementos de decoración.
Su marca pasó a pertenecer al grupo español Puig en 1986, pero ya colaboraron desde 1969 creando un lucrativo mercado de fragancias, con perfumes como Paco Rabannepour Homme y 1 Million.
La unión entre el diseñador y la compañía de moda y belleza se materializó después de que Antonio y Mariano Puig, miembros de la segunda generación de la empresa familiar, visitaran a Rabanne en sus oficinas cerca del Folies Bergère, en la capital francesa. Sellaron una leal alianza con un diseñador capaz de trasladar la pasión y la rebeldía juvenil a fragancias de éxito.
En 1999 Rabanne decidió alejarse del diseño, pero decidió seguir apegado al mundo de la moda al formar parte de jurados de festivales, donde le gustaba dirigirse a las generaciones más jóvenes.