En la sangre de Li Keran siempre hubo poesía y amor por la pintura.
Desde que nació Li Yongshun (李永顺) el 26 de marzo de 1907 en Xuzhou, provincia de Jiangsu, sus padres, unos comerciantes tenaces aunque analfabetos, le reconocieron su notable talento para el arte, uno que demostró desde una edad temprana.
Dado que no había suficiente economía para una educación formal, sus padres lo llevaron a que estudiara pintura con Qian Shizhi, un artista local que le enseñó el camino y lo inscribió en la Academia de Arte de Shanghai en 1923. Después de graduarse en 1925, regresó a Xuzhou para trabajar como profesor con el fin de promover el talento de su aldea, intentando regresar un poco de la fortuna y el apoyo que le tocó a él.
En 1929, gracias a su colorido arte y curiosas pinceladas, logró su entrada en la Academia Nacional de Artes de Hangzhou para realizar estudios de posgrado en arte occidental. Allí, coincidió con Lin Fengmian y el profesor francés André Claudot, con quienes estudió pintura al óleo.
Dos años más tarde, se unió a la Eighteen Art Society (o Yiba Art Society), donde adquirió el nombre de Keran, con el que continuaría y firmaría su trabajo durante el resto de su vida.
No obstante, a pesar de la notoriedad que comenzaba a gestar este grupo de artistas, la academia fue clausurada por el gobierno local cuando se dió el incio de la Revolución Cultural en China, un movimiento político, social y cultural que se desarrolló entre 1966 a 1976, donde consideraba a este grupo una fuerza rebelde que amenzaba la prosperidad de la nación.
Dado que la academia no pudo darle apoyo ni respaldo, Li Keran tuvo que marcharse del país junto con otros miembros, donde vivió en el exilio y empezó a incluir su faceta de poeta en sus lienzos que continúan vendiéndose, aunque casi clandestinamente dada la persecusión del gobierno.
En este tiempo, Li experimentó con las pinturas de paisajes negros, que aunque no fueron bien recibidas en Asia, más tarde se convirtieron en algunas de las pinturas más reconocibles de la pintura china.
Cuando finalizó la revolución y el conflicto, las autoridades permitieron a Li regresar a su país y reanudar sus formas tradicionales de pintura, que en aquel momento ya se fusionaban con elementos occidentales y trazos negros, lo que le valió su nombramiento en 1979 como el primer presidente de la Academia Nacional de Pintura del país.
Más tarde, dados los muchos seguidores que lo acompañaban y requerían entrar a sus clases, en 1980 se formó la Escuela Li, un lugar donde impartió poesía, técnicas de prosa, y los métodos de desarrollo para pinturas de paisajes china integrando técnicas nativas y occidentales, en gran medida, inspirado en los claroscuros de Rembrandt.
Su obra titulada Wan Shan Hong Bian, que usa tonos otoñales rojos, marrones y negros, se vendió en la Poly International Auction por 46 millones de dólares. La pintura está basada en un verso de un poema escrito en 1925 por el presidente Mao Zedong, que se traduce a "Veo miles de colinas en una vista carmesí, los bosques se amontonan en un tinte profundo".
De acuerdo a los historiadores, Li Keran realizó siete versiones de Wan Shan Hong Bian entre 1961 y 1964. De las siete pinturas en total, tres se pueden encontrar en el Museo Nacional de Arte de China, la Academia de Pintura China y Rongbaozhai, dos son propiedad de coleccionistas taiwaneses, y una permaneció en la familia del artista y la última, supuestamente la más valiosa, fue la que se vendió en la Poly International Auction.
Li murió el 5 de diciembre de 1989, y hasta la fecha es uno de los artistas chinos más valorados en el mercado del arte.
Una traducción de sus poemas lee:
Lotus leaves reach up to the sky,
endlessly green.
In the sun's reflection they turn a
brilliant red.