Favorecido por la tecnología y la migración latina en el mundo, el reggaetón se volvió un ritmo machacón y pegadizo que se esparció rápidamente hasta llegar a ser en 2006 el género latino más vendido en el mundo, según la revista Newsweek.
Nacido como un fenómeno underground de los barrios bajos de Puerto Rico y Panamá, es seguro decir que hay pocos fenómenos musicales tan increíbles y exitosos como este.
En un principio, el género fue una variante del reggae y el rap en castellano a la que se le agregó el dem bow, el característico ritmo repetitivo y casi hipnótico que conforma la base del reggaetón, pero fue haciéndose su propio sonido hasta hoy, que se realza claramente entre todos los demás.
Sin embargo, lo cierto es que cuando hablamos de este sonido, no vienen a la mente países como China, o la India, pero no porque o estén en nuestro top of mind, no significa que no hagan ni bailen al ritmo del reggaetón.
Es así que hoy te presentamos una brevísima introducción de este género en algunos países que pensarías que no lo tienen.
Bastante antes de que Luis Fonsi recibiera el honor de ser el “embajador turístico de Puerto Rico” al calor del éxito de Despacito, el reggaetón tuvo que luchar para encontrar su lugar. Pasó de ser un estilo atado una historia de racismo y colorismo (prejuicios raciales entre comunidades no blancas) en Panamá, estigmatizado y considerado vulgar, a madurar en Puerto Rico, donde llegó a ser la música que hoy conocemos.
Y es que el reggaetón primitivo, o reggaetón underground, tuvo su origen en los trabajos conjuntos que empezaron a realizar a mediados de los ochenta Vico C y DJ Negro, grandes aficionados a la música de orígenes africanos como el hip-hop, el dancehall o el plena panameño.
Aunque siempre se les ha considerado como los abuelos del estilo, sus primeras bases rítmicas tienen su origen en grabaciones de hip-hop previas. Estas primeras grabaciones poco conservan del dembow, ritmo asincopado típico del reggaetón, pero acabaron dando una plataforma a los raperos puertorriqueños que cantaban en español. Aunque solo consiguieron producir 20 copias de sus trabajos, la música comenzó a propagarse a través de la distribución informal de unos primeros seguidores que consiguieron realizar copias y pasárselas unos a otros en sus caseríos, los barrios de vivienda pública típicos de la isla.
Aunque al principio estas publicaciones pasaron desapercibidas para el mundo underground (los caseríos son aún hoy las zonas más depauperadas y maltratadas de Puerto Rico), la distribución casera de estas cintas y CDs acabó llamando la atención del público local.
“Toda la música viene de África. Hay un ritmo y una melodía diferente en cada área específica, pero cada ritmo latino se remonta a África. Comparten el mismo ADN”, dice el DJ Jose Luis, pionero del movimiento de reggaetón en el Reino Unido.
De hecho, todo lo que es, ha sido antes, ya que las estructuras musicales tradicionales del dembow dominicano fueron tocadas por esclavos africanos en el siglo XIX para comunicarse entre sí porque todos hablaban idiomas diferentes. Puerto Rico, donde el reggaetón está más asociado, es también el hogar de la bomba y la plena, géneros de música y danza arraigados en la historia de la esclavitud africana en la isla.
Panamá, posiblemente el verdadero hogar del reggaetón, tenía su propia población esclava original. Luego, otra capa de trabajadores inmigrantes llegó de Jamaica en el siglo XX para construir el Canal de Panamá, creando un pastel de capas musical aún más rico que fusionó la música latina y el reggae para convertirse en la primera expresión del reggaetón en la década de 1980.
Con el paso del tiempo, países como la India y China hicieron lo mismo que los africanos, y el resultado ha sido igual de bueno.
Esto resume perfectamente la mezcla de reggaetón, o música española específica de un área, y afro-beat, y cómo sus vínculos históricos se traducen en todo, desde la danza hasta la moda y la música. Con nueva legislación y censos, la población afrodescendiente de América del Sur ha sido reconocida cada vez más.
Disfruta a algunos de los artistas más emblemáticos de cada región.