El trabajo fotográfico del artista chileno Alejandro Gatta, de 47 años, resulta sumamente misterioso e intrigante.
A lo largo de casi 20 años de carrera, este fotógrafo ha buscado plasmar en las imágenes que captura los diferentes matices de la condición humana, un trabajo sumamente complejo.
A través del suspenso, la pasión y escenas en las que la violencia se deja entrever es que Alejandro Gatta hace reflexionar al espectador.
El misterio que este artista crea lo hace de forma sofisticada a través de sutiles composiciones donde las expresiones faciales, la forma de mirar o la posición del cuerpo revelan aspectos vulnerables de las personas.
Actualmente este artista forma parte de Gally, ubicada en la ciudad de Miami, Estados Unidos, así que te invitamos a conocerlo un poco mejor a través de Bio Fahrenheit.
¿Estudiaste arte o eres autodidacta?
Estudié fotografía, pero no me titulé ni ejercí hasta varios años después. Digamos: semi-autodidacta.
Describe tu profesión en una frase.
Padrísima.
¿Cuál fue la primera obra que te marcó para iniciar tu camino en el arte?
No una obra, sino mi amigo querido: Pedro Lemebel.
Lugar de inspiración o reflexión.
La calle o un buen sillón.
¿Cuál es tu punto de encuentro favorito con los amigos?
La sala de ensayo.
¿Cuál fue tu primera obra?
Una chica enmascarada con un solo ojo. Digamos que lo considero obra porque fue a conciencia. Antes, más bien andaba probando.
Tres creadores que admiras.
Jean Cocteau, Francis Bacon, Scott Walker y la cuarta, porque no puedo dejarla fuera, Julia Margaret Cameron.
¿Qué significa para ti crear?
Algo que en el proceso puede ser muy destructivo, pero que llegando a puerto (el mejor puerto posible) es el cielo.
¿Qué es lo que más importante en tu día a día?
Estar atento. Cosa bien difícil.
En tres palabras, ¿cómo te describen tus cercanos?
El Mero Mero.
Algo que quieras agregar.
Putin, détente.