El controversial artista británico Damien Hirst se ha apoderado de Gagosian Londres con su primera exposición que destaca sus peculiares esculturas de formaldehído creadas a lo largo de tres décadas.
Historia Natural es el nombre de la muestra que reúne más de 20 piezas que desdibujan por completo la línea entre arte y ciencia, la cual abrió sus puertas al público en general ayer.
Entre los animales preservados por Hirst se encuentran tiburones, ovejas, palomas, vacas, una cebra e incluso un unicornio, los cuales se ven suspendidos, de pie, cortados y desollados.
En 1991, este artista comenzó a jugar con el compuesto químico formaldehído pues exhibió un tiburón tigre de más de 4 metros de largo, The Physical Impossibility of Death in the Mind of Someone Living, obra catalogada como una de sus más controvertidas e importantes.
En esta ocasión, Hirst decidió documentar, a través de su cuenta de Instagram, el proceso de instalación de cada una de las piezas para que los espectadores pudieran apreciar el trabajo que implica su montaje.
Las imágenes perturbadoras, pero intrigantes, desafían la mente de los espectadores sobre la idea de la vida y la muerte, los hechos y la fe.
Acompañados de cuchillos o prendas de vestir como un guante, los cuerpos de los animales preservados aluden tanto a iconografías religiosas como a hechos y eventos psicológicos de dominio popular.
Con Historia Natural, lo que Damien Hirst busca es mostrar que la idea de preservación es inútil frente a la inevitabilidad de la muerte.