Oksana Zhnykrup fue y sigue siendo la reina del "oro blanco" ucraniano gracias a sus pequeñas esculturas de porcelana.
Quizá se conozca más a Oksana por haber sido copiada por Jeff Koons, ya que, en 2017, surgió un escándalo en el mundo del arte debido a que la escultura Bailarina sentada de este, instalada cerca del Rockefeller Center de Nueva York, fue una copia de la obra de la artesana ucraniana.
Pero realmente, la ucraniana es reconocida por su gran capacidad artística, su visión, y cómo junta todo para reflejar una auténtica expresión nacionalista de su país.
Obra del artista. Fuente: Family archive of V. Lozova - Diary Of Odessa
Más tarde quedó claro que, desde 2010, el artista estadounidense tenía el permiso oficial para usar dos obras de Oksana (Ballerinas before the performance, 1961; y Ballerina Lenochka, de1974) e incluso pagó regalías, sobre la base de la cual creó su Bailarina sentada.
Oksana fue determinada y dedicada, autora de muchas de estatuillas que en la época soviética, se podían comprar en numerosos salones de arte. Tales figuras todavía adornan aparadores y mesitas de noche en muchos apartamentos en varias ciudades de la antigua Unión Soviética.
Los críticos de arte señalan que el estilo de Zhnikrup se distinguió por su particular ligereza y plasticidad. Durante mucho tiempo, de 1955 a 1987, la artista trabajó en la Fábrica de Arte y Cerámica Experimental de Kiev, de cuya línea de montaje en 1974 salió la Bailarina Lenochka, que inspiró a Koons.
Su biografía no es rica en eventos, pero refleja vívidamente el trágico destino de muchos ucranianos en el siglo XX.
Nació el 31 de enero de 1931 en la ciudad de Chita en Transbaikalia, donde su abuelo pavimentaba caminos. Su madre fue actriz de teatro y su padre fue un funcionario que fue arrestado en 1937 acusado de espionaje y condenado a muerte. Como a la hija del "enemigo del pueblo" se le prohibió vivir en Kiev, por lo que estudió en la Escuela de Arte de Odessa; tras su graduación en 1952, trabajó en la fábrica de porcelana Baranovsky durante dos años, donde aprendió muchas utilidades que más tarde le funcionaron a su arte.
Su crecimiento estuvo marcado por una intensa búsqueda de temas que estaban en armonía con su rico mundo interior. La elección de las tramas en su arte siempre estuvo determinada no solo por la naturaleza delicada y gentileza que la distinguía sino también por la atmósfera única de acción teatral que impregnaba la vida familiar.
Elementos como el escenario teatral, la arena del circo, el elegante baile de balle se combinan maravillosamente y se entrelazan en imágenes llenas de dinámica, movimiento fijo y gesto. Al poco tiempo, produjo sus primeras obras de estos años: Cenicienta, La princesa cisne, Danza india, Danza española, y Danza coreana, que se caracterizan por una rica decoración de candelabros, oro, y el uso de una amplia gama de pinturas overglaze.
En 1955, Oksana se mudó nuevamente a Kiev gracias a su trabajo, y comenzó a trabajar en la Fábrica Experimental de Arte y Cerámica de la capital (KEKHZ). Ese período de trabajo duró hasta 1989; donde se reveló completamente su potencial creativo del escultor. Desde entonces, continuaron las búsquedas temáticas y estilísticas, que terminaron con muestras de referencia de pequeñas esculturas de porcelana, que ganó reconocimiento mundial.
Luego extendió su tándem creativo a lado de su esposo Vladislav Shcherbina.
Con los años, Oksana se hizo una de las primeras en abandonar la interpretación unilineal de la imagen de una mujer en la tradición del arte del realismo socialista. A su forma, se hizo una trabajadora colectiva y estética de Ucrania, que juntó el misterio, lo eterno, la belleza, y el amor en cada práctica que llevaba a cabo
Las obras más famosas: Bailarinas antes de la actuación, Noche de mayo y La princesa cisne con un Shulik, Amores o disgustos / Adivinación en una margarita, Debut, Abedul, Yaroslavna, Chica triste / Tal es su destino, ciclo Profesiones: Químico, Doctor, Maestro, Delegado, Bordado y La pastora y el deshollinador.
La sofisticación, la delicadeza, las líneas suaves, el misterio enfatizado, el lirismo, la ternura, y la dinámica fija del movimiento están sumamente impregnadas en las obras de la artista, por eso vale la pena recordarla. Cada una de ellas en una pequeña obra maestra de porcelana y dan testimonio no solo del altísimo nivel de artesanía, sino de toda la identidad ucraniana en general.
Fotografía de la artista Oksana Zhnykrup. Fuente: Family archive of V. Lozova - Diary Of Odessa
Oficialmente, la biografía creativa de la artista terminó en 1989, pero murió el 13 de enero de 1993 tras una grave enfermedad. Sus obras continúan siendo replicadas y representadas como productos de las fábricas de porcelana en Ucrania.