Las obras de la artista Lubaina Himid son famosas debido a que reivindican, de forma sumamente bella, la identidad de la diáspora africana.
Himid, originaria de Zanzibar, Tanzania, crea peculiares instalaciones en las que los colores juegan un papel crucial.
Formada como artista en el Reino Unido, las instalaciones de Lubaina Himid suelen aludir a la industria de la esclavitud y su legado.
Otro tema que esta artista de 68 años suele abordar constantemente en sus fascinantes instalaciones es la invisibilidad institucional de la comunidad africana y sus menospreciadas contribuciones.
Gran parte del aspecto dramático de sus obras de arte proviene de su temprana formación en el teatro y todo lo que vivió a lo largo de su infancia y adolescencia.
La madre británica de Himid conoció a su padre, que era de Zanzíbar, cuando eran estudiantes. Se establecieron juntos en Tanzania, pero su padre, un maestro, murió de malaria poco después del nacimiento de Himid, lo que la marcó profundamente ya que su vida inició de una forma terriblemente dramática.
Tras dicha desgracia, la madre de Lubaina Himi decidió mudarse a Reino Unido e instalarse en Londres para salir adelante.
La madre de esta artista fue una diseñadora textil que le ayudó a educar su ojo para los patrones y que a menudo, lo más que se lo permitía su trabajo, llevaba a su adolescente hija a museos y grandes almacenes, lo que moldeó (literalmente) su percepción de ver al mundo.
En 2017, Lubaina Himid se convirtió en la primera ganadora no caucásica del Premio Turner, uno de los reconocimientos más importantes del mundo del arte. Además se desempeña como profesora de Arte Contemporáneo en la Universidad de Central Lancashire, en Reino Unido.
Durante su trayectoria artística de más de cuatro décadas ha exhibido ampliamente tanto en Gran Bretaña como a nivel internacional, con exposiciones individuales en el Modern Art Oxford, Tate St. Ives y el Victoria & Albert Museum.