William Burroughs se abrió paso en el mundo de la literatura gracias a El almuerzo desnudo, novela que escribió en 1959 y que causó gran revuelo debido a que la descripción de la violencia y el sexo que empleaba molestaron a los editores norteamericanos, que solo lo publicaron tres años después.
El escritor estadounidense es considerado como un pionero en su ruptura con el estilo narrativo de la novela tradicional.
Formó parte de la famosa Generación Beat junto con el poeta Allen Ginsberg, Jack Kerouac y Gregory Corso, que ejercieron gran influencia entre numerosos escritores y artistas.
Burroughs nació en 1914 en Saint Louis, Missouri, y estudió en la prestigiosa Universidad de Harvard. Más tarde se mudó a Nueva York, convirtiéndose en adicto a la heroína.
Realizó numerosos viajes por el sudoeste de Estados Unidos, Europa, Latinoamérica y Africa, los cuales marcaron su obra literaria.
Destacó por ser profundamente independiente (el concepto de sociedad era una abstracción que no tenía sentido para él), por su tesis de que el lenguaje es un virus real que se propaga e infecta todo lo que toca y por haber experimentado y defendido durante años el uso de las drogas.
En su primera etapa en Nueva York, a mediados de la década de los 40, donde adquirió el hábito de la heroína, Jack Kerouac y Allen Ginsberg quedaron fascinados por las ideas de Burroughs, que los introdujo a la semántica de Alfred Korzybski, las ideas de Oswald Spengler (La decadencia de occidente), la escritura de Louis Ferdinand Celine y a su pensamiento antiamericano, en una época de gran prosperidad económica después de la Segunda Guerra Mundial en la que la propaganda oficial fraguaba teorías sobre una América imperial.
Por esta época comenzó su fascinación por el bajo mundo, explorando terrenos sórdidos, como Jean Genet, en gran medida debido a su adicción a la heroína.
Años más tarde, en Tánger, sería el propio Kerouac quien pasaría a máquina los desordenados manuscritos de El almuerzo desnudo, que serían publicados por primera vez por la editorial underground francesa Olympia Press, en 1959.
Precisamente en Tánger, donde conoció a Paul Bowles y vivió intermitentemente durante casi ocho años, los niños españoles le pusieron el apodo de "el hombre invisible" por su aspecto inconspicuo.
En México, donde vivió tres años, de 1949 a 1952, escribió su primera novela Yonqui, y ocurrió el extraño accidente en el que, jugando a Guillermo Tell con una pistola, mató a su mujer, Joan Vollmer, de un tiro.
Un año después viajó por Panamá, Colombia, Ecuador y Perú y experimentó con una serie de drogas, particularmente el yaj o ayahuasca, planta alucinógena utilizada en ritos chamánicos del Amazonas a través de la cual estas culturas establecen un diálogo con el más allá, y en cuyas visiones está basada gran parte de su cosmología.
Las alucinaciones inducidas por esta droga provocaron sus primeras ideas sobre el lenguaje como virus y, al menos en parte, el sistema de escritura collage que desarrollaría posteriormente, llamado cut ups o recortes.
En Quee, novela que expone por primera vez su tendencia homosexual, Burroughs se refiere a este viaje por Sudamérica y utiliza imágenes de centípedos basadas, según Barry Myles, autor de la biografía A portrait of William Burroughs, en códices mayas en los que aparece un hombre atado a un sofá que parece está siendo devorado por un gran insecto y remiten a La metamorfosis de Kafka.
Actualmente, la influencia de su obra se ve reflejada en muchos de los escritores del movimiento cyberpunk, palabra inventada por él, como William Gibson (Necromancer) o Bruce Sterling (Crystal Express) y los autores de un libro sobre él mismo llamado Cyberpunk 101 quienes aseguran que sin El almuerzo desnudo probablemente el movimiento no existiría.