El arte es cambiante, no es estático, es reflexivo y hasta crítico, como el hombre quien lo crea. El Renacimiento representó cambios en todas las estructuras sociales de Europa, y por supuesto en la cultura.
Los primeros grandes cambios se presentaron en siglo XIV en la política, la sociedad, la economía y en el arte.
La mirada gira hacia el hombre como centro de creación. El trabajo de artistas y artesanos es más valorado porque se enfoca en la naturaleza, el cuerpo humano y hasta en las matemáticas. Con estos cambios, Europa se prepara para transitar al Quattrocento.
Quattrocento (1400 – 1500)
Quattrocento siginifica en italiano “cuatrocientos” y comprende el movimiento de transición entre la Edad Media y la Moderna. En esta etapa apareció el “humanismo”, corriente intelectual que rescató los preceptos antiguos de los griegos y romanos.
El artista de este periodo representa a la figura humana como el centro de su creación y explora la perspectiva, la anatomía, profundidad y la proporción.
Los artistas más representativos de este periodo son Andrea Mantegna, Piedro della Francesca, Sandro Botticelli, Piero di Cosimo, Leonardo da Vinci, entre otros. La cuna de este periodo se gestó en la ciudad de Florencia.
Cinquecento (1530 – 1600)
Al periodo Quattrocento le siguió el Cinquecento (mil 500 años en italiano), periodo del “antropocentrismo humanista”, la doctrina que pone al hombre como centro de creación de todo. Aparecerá la “ética”, rama de la filosofía que estudia la valoración moral de los actos humanos. La ciudad de Roma fue la cuna del Cinquecento.
Los artistas más representativos de este periodo son Michelangelo Buonarrotti, Rafael Sanzio, Pietro Perugino, Giorgione, Pontormo, entre otros.
Manierismo (1550 – 1610)
Manierismo viene del italiano “manera” para designar el estilo exagerado en la pintura y escultura de ese periodo.
El manierismo fue la transición entre el arte renacentista y el barroco. Los artistas dejan de realizar esculturas y pinturas para la iglesia y exhiben sus obras fuera de este tipo de recintos religiosos, es decir, nacen las primeras exposiciones y galerías.
Tiziano, Arcimboldo, El Greco, Pieter Aertsen, Tintoretto, Cornelis van Haarlem y Juan Martínez Montañés, entre otros, fueron los artistas que sobresalieron en ese momento.