La nueva tienda en Beijing de Shang Xia, propiedad de Hermès, fue construida por el reconocido arquitecto Kengo Kuma.
El diseño de este lugar, impresionante en cada detalle, celebra la artesanía tradicional china y la traduce en una impactante, sofisticada y sensible presencia.
El espacio, organizado por particiones escultóricas, está bellamente creado con una serie de ladrillos de vidrio en forma de diamante, los cuales fueron colocados de manera espaciada.
Estos singulares ladrillos, cada uno de 14 por 5 centímetros, dan una asombrosa sensación de apertura y ligereza, además de que permiten al visitante mirar más allá de las estanterías y a través de todo el espacio.

De dicha forma, los que el arquitecto Kengo Kuma logró fue expandir de manera insospechada el compacto espacio.
El techo de esta tienda presenta un acabado totalmente espejado, detalle que sirve para expandir visualmente el volumen del interior al tiempo que aumenta la riqueza de textura de las particiones de los bloques de vidrio.

A pesar de la complejidad del diseño, la paleta monocromática resalta visualmente los coloridos productos y les permite emerger maravillosamente.
