La extensa filmografía de Martin Scorsese brilla con joyas universalmente aclamadas como Taxi Driver, Goodfellas y The King of Comedy, no obstante, a pesar de ser ampliamente reconocido como uno de los mejores cineastas de todos los tiempos, sus primeros intento en el cine, unos cortometrajes que valen todo el tiempo, han pasado desapercibidos entre nosotros.
Nacido el 17 de noviembre de 1942 en Nueva York, Marty, como lo conocen sus personas más cercanas, desarrolló una pasión por el cine temprano en su vida.
Cuando era niño, no podía practicar deportes con otros niños porque sufría de asma y, como resultado, pasaba la mayor parte del tiempo en las salas de cine.
Creciendo en el Bronx, solía salir a alquilar la película de 1951, The Tales of Hoffmann, de Emeric Pressburger y Michael Powell, una película que el mismo Scorsese ha reconocido su influencia en su realización cinematográfica, donde encontraba inspiración y encanto que lo llevaría más tarde a caer en la recién estrenada NYU Tisch School of the Arts.
Estos años como estudiante, sumergido en Federico Fellini y su profesor Haig P. Manoogian, Martin empezó a preparar sus propios cortometrajes, y en 1963 estrenó What's a nice girl like you doing in a place like this?, filmado con película de 16 mm y resaltando en elementos cinematográfica como animaciones, montajes, cortes de salto, edición asociativa y tomas de fotograma congelado.
En esta entrega, considerada el debut en el séptimo arte de Marty, también trabajó Thelma Schoonmaker, quien lo ayudó con la edición.
Su segundo cortometraje se tituló It’s Not Just You, Murray!, que estrenó en 1964, y más tarde llegaria al Festival de Cine de Nueva York, donde Scorsese presenta a Murray, su primer gángster, y cuenta la historia de un mafioso que recuerda sus inicios en el mundo de las armas.
La trama, basada en el tío de Scorsese tiene una duración de 15 minutos, y también fue filmada en una película de 16 mm en blanco y negro.
El cortometraje ganó varios premios, incluido el Premio del Gremio de Productores a la Mejor Película de Estudiantes, así como el Premio Intercolegial Jesse L Lasky.
El más famoso de sus cortometrajes de este período es la comedia negra, The Big Shave, que dió a conocer en 1967.
Se trata de una película de seis minutos que presenta a Peter Bermuth como sujeto de una ansiedad incontrolable que le hace afeitarse compulsivamente el cabello y luego la piel, afeitando todo lo que propaga la ilusión de seguridad.
Este corto se hizo durante su tiempo en NYU y para una clase de producción cinematográfica llamada Sight & Sound Film.
Otro trabajo que se debe mencionar durante esta etapa es Italianamerican, una historia de amor sobre sus padres y su origen,
Tocando muchos de los temas clave que han sido claves en la cinematografía del director, como la identidad italoamericana, el sentido de familia, su amada ciudad de Nueva York, entre otras cosas, estos cortometrajes son trabajos sinceros, divertidos y bien hechos que dan pie a muchas de las películas que amamos de Martin Scorsese.