Salir a caminar, y más cuando se está de vacaciones, es una de las actividades más agradables que se pueden hacer. Ahora imagínate hacerlo en uno de los jardines más bellos de Francia: Les jardins suspendus de Marqueyssac.
Estos jardines, ubicados en Vezac, cuentan con un romántico y sumamente singular estilo. Rodean un imponente castillo del siglo XIX y está conformado por más de 150 mil centenarios bojes (una especie de arbustos) tallados a mano.
De hecho, el camino en su totalidad está lleno de cascadas, teatros vegetales, miradores y asientos, así que los recorridos que se realizan en los jardines colgantes de Marqueyssac resultan una verdadera delicia.
En Marqueyssac estos arbustos son los grandes protagonistas gracias a sus redondeadas formas y a las continuas podas a las que son sometidos.
En total, el parque cuenta con una superficie de 22 hectáreas y se encuentra enclavado en un saliente rocoso. En este jardín se encuentra el famoso Mirador de Dordaña, ubicado a 130 metros de altura del río, y donde disfrutarás de unas vistas excepcionales de Perigord.
En Marqueyssac también encontrarás una señalización muy completa con información de la naturaleza y de las especies animales y vegetales de la zona.
El parque abre todos los días el año y en él hay un restaurante y salón de té, donde podrás pasar horas reponiéndote del largo recorrido que realizarás en este hermosísimo lugar.