La obra de la artista mexicana Tatiana Parcero explora el cuerpo y todas las conexiones que este mantiene con la identidad y el mundo natural.
La genialidad de Parcero radica en que yuxtapone la figura humana, que en casi toda la obra es suya, y encuentra rincones a explorar en la imaginación.
Su propuesta va más allá del exterior visible, por lo que las capas que expone Parcero son tanto literales como simbólicas, además de hermosas y bastantes cargadas.
Para lograr lo anterior, Tatiana Parcero ha integrado dibujos anatómicos, códices, mapas coloniales y astrológicos, construcciones químicas y dibujos de estilo naturalista con fotografías contemporáneas del cuerpo.
Fragmented self-portrait (palms) with anatomical drawing. Tatiana Parcero. Fuente: jdc Fine Art - Gallery
Esta artista no muestra una parte de su cuerpo como tal, pues prefiero ser mucho más lúdica y combinar impresiones a color de diagramas de anatomía antigua y de códices prehispánicos para aludir a esa y a las demás partes del cuerpo humano.
La meta que esta artista busca alcanzar con lo anterior es inspeccionar, de una forma bastante original, el interior de su propio y enigmático universo.
Parcero, quien tiene una maestría en Artes Plásticas en la New York University y el International Center of Photography, ha expuesto en Inglaterra, Estados Unidos, Italia, Cuba y México.
Resulta sumamente interesante cómo con imágenes tridimensionales, Tatiana Parcero recurre al acetato para mostrar cuerpos transparentes que le permiten manipular la fotografía y reconstruirla con gráficas de cortes transversales del cuerpo y de códices prehispánicos.
Self-portrait of artist (side view of torso) while pregnant with colonial map. Tatiana Parcero. Fuente: jdc Fine Art - Gallery
Esta fotógrafa encontró en los códices ríos, lagos y algunos aspectos iconográficos que le remitían a la anatomía, específicamente a las venas y las arterias de nuestro cuerpo, así que decidió utilizarlos en sus imágenes porque detectó que tenían que ver con su propia historia.
Viviendo en el extranjero, lejos de su país, el deseo inconsciente de Parcero fue el de ubicar su identidad y consolidarla utilizando las imágenes que tuvieran que ver con sus raíces sociales, culturales e históricas.
La también videoasta, quien por varios años ha realizado diversas exploraciones técnicas, juega con el cuerpo como si se tratara de una representación geográfica debido a que un mapa le ayuda mejor a ubicarse para iniciar su indagación del mundo que le rodea. Una idea sencilla, pero sumamente poderosa.
Así, a través de su extraordinaria (y bastante poética) obra, es que Tatiana Parcero ha podido encontrar su identidad al traspasar los límites del cuerpo humano y combinar imágenes del mismo con códices prehispánicos y mapas.