Hace 60 años (el 22 de marzo de 1963), lanzaron su primer disco, Please Please Me, y con éste, prácticamente su carrera al estrellato. Ahora, este 4 de abril se han cumplido también 60 años de su primer concierto en vivo y se ha hecho pública la primera grabación en vivo (hasta ahora inédita) de un concierto de los Beatles. Vaya forma de celebrarlo.
El concierto tuvo lugar en el internado de Stowe, en el condado de Buckinghamshire, el 4 de abril de 1963, cuando el cuarteto de Liverpool tocó en el teatro de la escuela. Fue grabado por un alumno que, 60 años después, ha hecho pública la cinta, quien tenía un nuevo aparato para grabar video y quería probarlo.
Ahora, este septuagenario ha sacado a la luz -a través de la BBC-, seis décadas después, tan increíble documento.
John Bloomfield ha afirmado que considera que pasó “de niño a hombre... en ese mismo instante”. La gestación del evento fue a través del también alumno David Moores, quien había escrito al mánager Brian Epstein, quien, cita la BBC, reconoció la conexión de éste con una importante familia de Liverpool.
Los Beatles en una conferencia de prensa de 1966. Foto: NME
Los Beatles tocaron por 100 libras y Moores recaudó fondos vendiendo las entradas a los compañeros de escuela.
El concierto se realizó frente a una audiencia casi exclusivamente masculina, que gritaba y vitoreaba, pero no ahoga la grabación. El repertorio, una mezcla del que realizaban en el club de versión de rhythm and blues y el principio asociativo de Lennon y McCartney, con algunos temas de su álbum debut Please Please Me, lanzado apenas dos semanas antes.
El historiador de los Beatles, Mark Lewisohn, considera que es una grabación increíblemente importante y añade: “Ni siquiera sabía que existía esta cinta hasta que me lo contaste, y creo que tuve que levantarme del suelo”, le dice a la BBC.
El propietario de la cinta explica que para la época nadie sabía quiénes eran los Beatles en esa escuela, pero aparecieron y tocaron en un concierto increíble y eso fue el comienzo de los años 60 en lo que a ellos respecta.
“Fue fabuloso”, dice a la BBC, e incluso como detalle divertido, añadió, “estaba muy molesto” de que músicos “desconocidos” le restaran espacio de actuación a su propia banda aquella noche.
Y es que este concierto tiene un punto simbólico. Porque aunque Stowe era una escuela de niños, algunas niñas miraban a los Beatles desde atrás.
“No fue hasta que empezaron a tocar que escuchamos los gritos y nos dimos cuenta de que estábamos en medio de la Beatlemanía”.
Y más detalles. Los Beatles venían de una grabación de la BBC en París, y allí en Stowe tocó 22 canciones en una hora. Se les escucha recibir peticiones de los alumnos. También hay bromas entre banda y público, con un George Harrison sin voz, que no podía cantar.
Después del espectáculo, los miembros de la banda conocieron a algunos de los niños de la escuela y disfrutaron de una comida de pollo y papas fritas, que según los informes “devoraron”, cita The Evening Standard sobre el postconcierto.
El episodio completo de Front Row está disponible en BBC Sounds.