El histórico y prestigioso edificio de La Bourse de Commerce, ubicado en el corazón de París, da la bienvenida al artista Philippe Parreno y su muestra Echo 2.
A través de esta muestra que estará disponible hasta el 26 de septiembre, el artista multidisciplinario francés invita a los visitantes a explorar situaciones, a través de los sentidos.
De esta manera Echo 2 llama a la memoria, pero también a escuchar, observar, oler y, de alguna manera, tocar, en la medida en que elementos como el aire y el sol se comunican con la piel.
Ubicada en la Rotonda de La Bourse de Commerce, esta muestra tiene como objetivo desconectar al visitante de todo y enfocarse únicamente en el momento.
Para lograr esto los espectadores podrán disfrutar una proyección en una pantalla LED gigante con uno de los videos más famosos del artista, Anywhere Out of the World (2000), en el que Ann Lee toma conciencia de su personaje ficticio y la historia de su creación para buscar la liberación.
A esto se suman jóvenes actrices que encarnan a Ann Lee provocando un intercambio con los espectadores, pero que además desdibujan la frontera entre realidad y ficción.
La idea de este performance es mostrarle a los visitantes que un personaje ficticio, puede convertirse en una persona real, al igual que los humanos que interactúan con él.
Pero este no es el único no humano que "juega" con los visitantes. Un "biorreactor", compuesto de levadura, es el encargado de tomar el control de las luces, los sonidos y el movimiento en la Rotonda.
Del mismo modo, el dispositivo Echo (Danny in the Street) —producido inicialmente para el MoMA en 2019—habita el espacio de forma difusa, junto a los helióstatos que recogen la luz del sol para proyectarla en la Rotonda o un montón de nieve artificial que produce una sensación de frescura.
En este entorno total, el visitante se convierte en paciente, receptor de acciones formuladas por distintos tipos de actores no humanos: una imagen, un personaje, el sol, elementos diminutos, cada uno de los cuales y a su manera, emiten signos que conforman la exposición.
Un mundo donde el comportamiento humano parece ser predecible y modificable por algoritmos e inteligencia artificial.
