Las mujeres de los Yakuza, mafia japonesa que data del siglo XVII, viven en las sombras y es justo por eso que la fotógrafa francesa Chloé Jafé les dio voz y mostró un lado que solo unos cuantos, los más cercanos conocían: su fortaleza y belleza sin igual.
Por un lapso de cuatro años Jafé trabajó en el proyecto Inochi Azukemasu (I give you my life), el cual muestra el rol y estilo de vida de las amantes y esposas de los hombres que integran una de las más poderosas mafias del mundo.
La labor que realizó fue titánica y para lograrlo trabajó como anfitriona en un bar de Ginza para conocer a profundidad dicho mundo. Gracias a esto Jafé pudo conocer a un grupo Yakuza de Tokio, quienes aceptaron dejarse fotografiar por ella.
Infiltrarse en dicho mundo, en el de los Yazuka, fue verdaderamente complicado para la francesa pero de ello aprendió dos cosas: gaman, que en japonés significa paciencia, y gambarimasu, que es dar lo mejor de uno mismo.
Todo inició cuando Chloé Jafé conoció a un jefe Yakuza durante un festival japonés. En dicho momento anotó su contacto y pocos días después le marcó para invitarlo a cenar y hablarle de su proyecto.
Jafé tuvo éxito y poco a poco fue adentrándose en mundo de los Yakuza. La fotógrafa ha explicado en varias entrevista que mientras más entendía su cultura y reglas, mayor acceso iba teniendo, lo que le pareció fascinante.
Una de las cosas que más llamaron la atención de la artista fue el ambiguo rol que juegan las mujeres en la organización ya que no son consideradas Yakuza, pero son miembros debido a que sus esposos o amantes lo son.
Las esposas Yakuza, de acuerdo con Chloé Jafé, no responden directamente al jefe de la mafia como lo hacen sus hombres, pero de vez en cuando tienen que cumplir con algunas obligaciones con el grupo.
Generalmente las mujeres Yakuza se hacen cargo de las finanzas de la casa y trabajan en los negocios de sus esposos.
Otro dato a resaltar es que entre ellas hay una jerarquía, la cual se basa en el rango de su esposo. La esposa del jefe está hasta arriba y tiene el papel más importante. Su papel es crucial ya que si su esposo muere o va a la cárcel, ella tomará el control del grupo.
En cuanto a los tatuajes que llevan estos reciben el nombre de Irezumi y tienen un profundo significado ya que son símbolo de fuerza, paciencia y resistencia al dolor.
Pese a que son verdaderas obras de arte, que pueden llegar a tomar varios años en completarse, no deben ser vistos por nadie más que por su marido o amantes.
Justo por esto y muchas otras cosas más, Chloé Jafé buscó dar notoriedad a estas bellas e increíblemente valientes mujeres.