Hector Guimard (1867-1942) fue un arquitecto francés, representante principal del Art Nouveau en su país.
Sus primeros estudios de arte los realizó en París, más adelante ingresó a la Escuela Superior de Bellas Artes, donde se graduó como Arquitecto en 1889.
Se identificó con las teorías de Viollet-le-Duc y realizó viajes por Inglaterra, Escocia, Holanda y Bélgica, sitios que lo inspiran notablemente.
Tras su visita en Bruselas al Hôtel Tassel de Víctor Horta, Guimard se vio influenciado por el Art Nouveau y evolucionó hacia una libertad en la que puso de manifiesto su amor por la naturaleza.
En 1900 construyó en París la casa Canivet, la Maison Coilliot en Lile y los accesos de las estaciones de metro parisinas, todas con un toque de fantasía en las que utilizó arcos de metal con decoraciones prefabricadas.
El Cartel Béranger volvió famoso a Guimard y trajo consigo numerosos pedidos que le permitieron precisar aún más sus investigaciones estéticas que lo incitaron a una concepción casi totalitaria del decorado interior, dando como resultado obras como el Hôtel Guimard, regala de boda que le hizo a su esposa.
Ese mismo año participó en la Exposición Universal de París, donde presentó algunos de sus proyectos arquitectónicos, una muestra de mobiliario, tejidos, piezas de vidrio y otros elementos decorativos de su creación.
Destacó por sus innovaciones estructurales como las que aplicó en la sala de conciertos Humbert-de-Romans (1901), en la que una estructura compleja divide las ondas sonoras para conseguir la acústica perfecta.
El estilo de Hector Guimard fue muy personal, de formas libres, sinuosas y elegantes, inspiradas en la vegetación, pero de un carácter más abstracto que figurativo.