El consumismo, el ocio, la sobrestimación de los medios, la desconexión emocional, el sueño americano en el mundo occidental, la obsesión con la juventud eterna, entre otros, son temas que inspiran a la fotógrafa Tania Franco Klein.
Su fascinación por el comportamiento social y las prácticas contemporáneas han llevado a la mexicana a crear imágenes que parecen fluctuar entre un mundo real y ficticio a la vez.

Para Franco Klein, el proceso de impresión tiene un gran peso en su trabajo y asegura que no existe en realidad hasta que lo veo impreso. Tener una imagen te da la oportunidad de confrontarla y de crear un vínculo entre el espectador y esta.
La narrativa de la mexicana posee cierta ambigüedad que invita al espectador a crear una historia e interpretación propia y única de la imagen.