Kervin Brisseaux es un artista y diseñador haitiano que actualmente reside en Nueva York, Estados Unidos, y actualmente trabaja en la firma creativa Vault 49.
Estudió una maestría en Arquitectura en la Universidad de Syracuse, lo que le brindó una nueva y mucho más fresca mirada a lo que hace debido a que esto le permite ver su trabajo desde un aspecto mucho más técnico.
Su carrera como ilustrador comenzó en la década de 2010 con propuestas vectoriales que se sentían futuristas y realmente elegantes, algo poco común.
Desde pequeño Brisseaux mostró un gran interés por las ilustraciones, pero debido a que sus padres hicieron un gran esfuerzo para vivir en Estado Unidos este nunca quiso decepcionarlos, así que decidió estudiar una carrera, la de arquitectura, y una maestría en la misma especialidad para que vieran que sus esfuerzos habían valido la pena.
Lo triste de esto fue que, por muchos años, Kervin Brisseaux no pudo ser honesto consigo mismo y lo que verdaderamente le apasionaba hasta el momento que estudió su posgrado y vio que tenía que hacer algo al respecto.
Por azahares del destino, la ilustración entró en la vida de Brisseaux cuando este aún se encontraba en la escuela de posgrado. Todavía estaba estudiando arquitectura, encontrando su nicho, enfocándose más en el elemento gráfico de la especialidad y no tanto en la ciencia de la estructura.
Cuando todo parecía que estaba ya planeado para Kervin Brisseaux resulta que obtuvo un inesperado giro ya que consiguió un trabajo como freelance en el que le pedían ilustraciones arquitectónicas muy al estilo de Neil Denari, quien se ha especializado en presentar mundos distópicos.
Sus primeros trabajos contaban con una fuerte influencia del manga, anime y cómic por la cantidad de detalles que presentaban, además de los duros contrastes de las sombras que incorporaba en sus dibujos.
Debido a que Kervin Brisseaux recibió una formación formal en arquitectura y no en diseño gráfico, su camino como ilustrador le tomó algo de tiempo pues no lograba entender la jerga de la misma y esto hizo que todo se complicara un poco más, pero definitivamente descubrió el camino por el que quería seguir caminando y creciendo.
Con el paso de los años este artista, al que jamás se le ocurrió que podía vivir de su creatividad, fue encontrando su estilo, uno que ha sido aplaudido y sobre todo bien recibido por mostrar mundos totalmente alternativos.