Mercedes Martínez / AURORA
Las artistas Paola Delfín y Pilar Cárdenas participan en la exposición “El espíritu del 22 - Un siglo de muralismo en San Ildefonso”, la cual se encuentra en salas hasta junio de 2023. Sus murales están en la última sala, así que (literal y figurativamente) es necesario hacer un recorrido por la historia del muralismo mexicano para llegar a ellos.
Uno podría hacer trampa e ir directo a la Sala 21, en donde se encuentran la sección Muralismo y Resistencia; sin embargo, los 100 años de muralismo que se condensan en las salas y en los muros del edificio enriquecen nuestra mirada y nos preparan para poder profundizar en las obras de Paola y Pilar.
La primera sensación al entrar en la Sala 21 es de confusión, pues nos encontramos en una sala que está inconclusa, ya que las obras de este espacio se van realizando a lo largo del periodo de la muestra.
De momento (y hasta finales de marzo) sólo están los murales de Paola Delfín y de Pilar Cárdenas en sala. Así nos lo explica el guía que cuida y observa las obras con cariño. Es gracias a él que nos enteramos de varios detalles de las intervenciones, pues no hay explicaciones de los murales ni biografía de las artistas en la sala.
Las obras se miran de frente y dialogan entre sí. El guía nos platica que las artistas también fueron modelos al momento de hacer su obra; así podemos ver a Pilar en la obra de Paola y viceversa. Ambos tienen a una figura femenina al centro como personaje principal de su muro, punto de partida que sirve para que cada una cuente su historia.
“Diego y la Cuarta Dimensión”
En un principio el mural puede parecer un conjunto de tres piezas o paisajes aislados puestos al azar, pero no es así. En la intervención de Pilar Cárdenas es notoria la influencia de Diego Rivera, tanto en la parte central como del lado izquierdo.
Es a la izquierda donde tenemos a Rivera entregando los cimientos del muralismo a una mujer en posición reflexiva, así como un volcán humeante que hace eco a la figura central. De su cabeza sale la verdadera erupción, una que viene del pasado y llega al futuro (el lado derecho), en donde el humo del volcán se transforma en seis caballos recibidos por una figura etérea, que se funde con el paisaje.
Las influencias y paisajes que retoma Fusca, armonizan con los colores y temáticas que la artista ha desarrollado con el tiempo. Podemos ver a la naturaleza y flores, así como las esculturas, los caballos y los elementos oníricos que caracterizan su obra.
“Movimiento Perpetuo”
Los muros de Paola Delfín son conocidos por su estilo monocromático y este mural no es la excepción. Esta obra parte de una figura femenina central que se desdobla y nos muestra a diferentes mujeres con sus distintas visiones y experiencias vividas en el pasado, presente y futuro colectivo. El guía nos comenta que vale la pena concentrarse en los ojos de cada una, así como en los ángulos de sus rostros.
A las orillas de la intervención podemos observar columnas que nos marcan las bases e influencias de occidente y del México prehispánico en el muralismo. También observamos varias alusiones a la tradición del muralismo mexicano y elementos que no pueden faltar como el maguey, las águilas y los caballos.
Su mensaje tiene varias capas de profundidad. El más contundente es la mujer que lucha y toma un papel central; asumiendo los derechos que tiene sobre su cuerpo y su vida.
Sobre las muralistas:
Paola Delfín
La mexicana Paola Delfín es una artista (pintora y muralista) autodidacta con una carrera consolidada en el arte urbano. Su obra va ligada a mensajes poderosos comunicados a través de figuras femeninas que no necesitan del adorno del color para brillar con fuerza y empoderarnos.
Podemos encontrar sus murales tanto en México como en el extranjero; en países como Alemania, China, Holanda, Perú, Colombia, Cuba y más recientemente en India.
Pilar Cárdenas
La artista -pintora, escultora y muralista- originaria de Culiacán, Pilar Cárdenas (conocida en el mundo del arte urbano como Fusca) se inició como artista autodidacta de forma paralela a sus estudios en psicología. Más adelante entró a la Academia de San Carlos en la Ciudad de México. Además de sus estudios como artista, Fusca es Maestra en Teoría Psicoanalítica y Dirección de Arte.
En su obra se puede ver como el arte y la psicología se funden para crear mundos oníricos que nos llevan a la reflexión, a cuestionarnos y a romper paradigmas.