Apodado tanto el "Matisse of the East" y el "Modern Bada Shanren", el arte de Ding Yanyong logró una hábil unificación entre la estética oriental y occidental.
Nacido el 15 de abril de 1902 en Maopo, Xieji, Maoming, China, tras una infancia dedicada a la disciplina y al encanto por el dibujo, así como de su graduación de la escuela secundaria, el gobierno provincial de Guangdong lo envió a estudiar dibujo con Fujishima Takeji en Japón.
Con su formación, una dedicada a las bases del Nihonga pero también de su alcance en China, le apoyó para su entrada en la Escuela de Bellas Artes de Tokio, donde conoció por primera vez la obra de Henri Matisse, con quien entabló una amistad duradera.
Al graduarse de la escuela en 1925, Ding regresó a China para convertirse en un exponente pionero de la pintura occidental a principios de la década de 1930, donde comenzó a explorar el trabajo de maestros chinos como Bada Shanren y descubrió una afinidad entre ellos y sus ídolos occidentales.
Woman and Parrot, 1977. Fuente: WikiArt
"Son lo mismo", escribió en su diario, "excepto que China precedió a Occidente por 700 años".
A finales de la década de 1920 y principios de la de 1930, Ding adoptó las actitudes individualistas de los literatos chinos y las tradiciones individualistas, al tiempo que profundizaba en la caligrafía antigua, influenciado por las obras del artista del siglo XVII Bada Shanren.
Con esta ideología que se nota en su obra, Ding estuvo activo como pintor e instructor de pintura en varias ciudades de China hasta la culminación de la Revolución Comunista en 1949, momento en el que se trasladó al Hong Kong británico y reanudó su práctica artística y su enseñanza, una que comenzó a ser cotizada y reconocida por su paleta vibrante y profundamente marcada por el fauvismo.
Opera Figures: Farewell my Concubine, 1975. Fuente: WikiArt
Con pinceladas caligráficas tradicionales y modos casi primitivistas inspirados en las apropiaciones de los diseños africanos, así como en su propio estudio intencional de las tallas aborígenes taiwanesas, las pinturas de Ding Yanyong se consagraron como una de las más diversas de la época, cuestión que solo otorgó fuerza a su declaración como artista.
Durante esta época de estabilidad que encontró en Hong Kong, el artista visitó y expuso en Melbourne, París y Kioto a fines de la década de 1970. Continuó enseñando y produciendo arte hasta su muerte en Hong Kong en 1978.
El trabajo de Ding, uno de los primeros artistas chinos que fueron a Japón para estudiar pintura occidental en las primeras décadas del siglo XX, se encuentra en el Museo de Arte de Hong Kong, el Instituto de Arte Contemporáneo de Singapur y el Museo de Arte Johnson en Ithaca, Nueva York, entre muchos otros más.