Pol Bury, un nombre que continúa en movimiento

28 de Abril de 2021 a las 11:12 hrs.
Pol Bury comenzó su evolución artística como pintora surrealista pero se hizo ampliamente conocida por sus esculturas cinéticas. Fuente: julesmaeghtgallery.com
Pol Bury comenzó su evolución artística como pintora surrealista pero se hizo ampliamente conocida por sus esculturas cinéticas. Fuente: julesmaeghtgallery.com

 

Pol Bury nació en La Louvière, Bélgica, el 26 de abril de 1922.

Tras asistir a la Académie des Beaux-Arts en Mons de 1938 a 1939, se unió a un grupo de poetas surrealistas que incluía a Achille Chavée, marcando el inicio de su interés por el Surrealismo y las obras de René Magritte, Yves Tanguy, y Joan Miró que apoyaron sus primera muestras a fines de la década de 1930 y la primera mitad de la de los 40, que incluyeron la Exposition Internationale du Surréalisme de 1945 en Bruselas. Reflexionando sobre su atracción inicial por el surrealismo, Bury señaló más tarde: "Fue la postura total del movimiento surrealista lo que me fascinó".

El artista que llegaría a las vitrinas de lo rincones más exclusivos del arte, también dejó de lado un tanto su profesión durante la Segunda Guerra Mundial, cuando participa en los movimientos de Resistencia contra los nazis, explicando bajo su propia voz que en esas épocas "El trabajo de seguir con vida ocupaba días y noches." 

Años más tarde y tras el conflicto mundial, Bury adoptó otro enfoque, abandonando aquel que componía nuestras sueños, en 1952 después de visitar una exposición que presentaba el trabajo en movimiento de Alexander Calder, y fue entonces que comenzó a producir esculturas sus primeras esculturas cinéticas que se exhibieron en la exposición colectiva de 1955 Le Mouvement en la Galerie Denise René de París. Esta apertura de su arte lo llevaría a participar en nuevas exposiciones y revistas de la autoría de Heinz Mack y Otto Piene.

 

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Pol Bury & Alexander Calder, 1952. Fuente: Accueil.
 

Para finales de la década de 1950, Bury comenzó a incluir motores eléctricos en muchas de sus esculturas, lo que hacía que los elementos se inclinen, giren o practiquen un esfuerzo, condición que llevaría a Pol Bury a aceptar que buscaba el punto que existe entre lo móvil y lo inmóvil.

En 1964, el artista creó sus Cinetizaciones, es decir, su muestra de fotografías y grabados que representan monumentos conocidos, pero con la estructura arquitectónica fundamentalmente alterada. Por ejemplo, en su Cinetización con la Torre Eiffel, la estructura de hierro parece tambalearse como si estuviera al borde del colapso.

 

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Cinetización, Eiffel Tower. Fuente: Kunzt Gallery.
 

Para fines de la década de 1960, Bury comenzó a trabajar con acero inoxidable y Cor-Ten, latón pulido y cobre, lo que le daría el salto a las obras públicas, tema que lo graduó como uno de los prinicipales exponantes del arte cinético, encontrando espacio para sus obras en el Museo de Arte de la Universidad de Iowa, que significaría su primer gran encargo en Estados Unidos, país que, desde 1965, se ha convertido en el principal comprador de su obra.

Las obras de Bury también descansan en la Moderna Museet de Estocolmo, el Louisiana Museum de Dinamarca, el Museo Solomon R. Guggenheim de Nueva York, el Museo de Arte Moderno de la Ciudad de México, el Museo Josef Albers en Bottrop, Alemania, el Musée d'art moderne de la Ville de Paris, y muchos espacios más, demostrando un arte cinético sin límites o fronteras.

 

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Volume Fige. Fuente: Kunzt Gallery.
 

Con todos los fundamentos de sus esculturas cinéticas, las numerosas fuentes que Pol Bury diseñó a lo largo de su vida involucran arreglos de cilindros y esferas que se mueven lenta e irregularmente. En estas obras, el artista adopta los reflejos y efectos de luz producidos por la interacción del metal y el agua al aire libre, demostrando también momentos de contingencia física que desmienten el cierto tirón de la gravedad.

Esferas en movimiento muy lento, a veces a favor de la corriente del agua, a veces a contracorriente, no siempre moviéndose al unísono, se transforman en la marca de fábrica de Pol Bury, todo un clásico de la modernidad, que con su arte pretendió dar vida y movimiento a las misteriosas bolas metálicas que pueblan tantos trabajos de René Magritte.

 

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Alchetron. Fuente: Pol Bury Sitio Oficial.
 

La muerte alcanzó a Pol Bury el 27 de septiembre de 2005 en un hospital de París, aunque su arte que figura alrededor del mundo habla de sus sueños, su legado, y sus ideas, firmes como las eculturas cinéticas que dejó atrás.

 

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Acier, 1917. FuenteSABAM Belgium.