El Museo y la Biblioteca de la Sociedad Hispana de Nueva York están de manteles largos debido a que dibujos en carboncillo hechos por el muralista José Clemente Orozco ahora forman parte de su colección.
Lo anterior resulta de suma importancia debido a que el siguiente año, en dicho recinto, se llevará a cabo una muestra dedicada a Orozco, Diego Rivera y David Alfaro Siqueiros.
La biblioteca inició operando como resguardo de libros raros, pero con el paso de los años decidieron que también debía contar con un museo para así poder albergar las piezas de arte, principalmente pinturas latinoamericanas, que por alguna razón ya estaban bajo su cuidado.
Guillaume Kientz, director del Museo de la Sociedad Hispana, detalló que en total se sumarán 20 dibujos al carboncillo del también pintor al acervo.
Museo de la Sociedad Hispana. Fuente: The Art Newspaper
Entre los dibujos donados por Michael y Salma Wornick, una pareja de California, se encuentra un boceto del famoso mural El hombre en llamas, que está ubicado en el interior del Instituto Cultural Cabañas de Guadalajara y mide 11 metros.
Esta obra, considerada una de las obras más importantes de Orozco, fue catalogada como Patrimonio de la Humanidad en 1997. En ella se representa al Viejo Mundo y la naturaleza ritual de los pueblos originarios, regidos por una inflexible ley que los alejaba, según la crítica, de la compasión.
Mural El hombre en llamas. Fuente: LOFF
Pero el recinto también cuenta con otras dos adquisiciones y se trata de dos retratos de una pareja mexicana hecha entre 1847 y 1848 por Pelegrín Clavé y Roqué, un pintor español que residía en México.
Estas obras, al igual que los dibujos de Orozco, también fueron donadas.