Las instalaciones a las que da vida la artista Anila Quayyum Agha resultan sencillamente deslumbrantes no solo por los coloridos y bellísimos patrones con los que cuentan, sino por sus profundos y reflexivos mensajes.
Con el paso de los años, Anila, de 57 años, se ha especializado en crear inmersivas instalaciones de luz cuyo objetivo es el de brindar un ambiente que desprenda inspiración y esperanza al espectador, algo que en estos tiempos se agradece más que nunca.
Básicamente estas instalaciones funcionan como cajas de luz debido a que suelen proyectar intrincados patrones decorativos en coloridos entornos.
Utilizando un láser, Anila Quayyum Agha corta los fascinantes patrones inspirados en motivos geométricos islámicos en cubos de acero.
Luego, con un sencillo mecanismo que la propia artista suele instalar en estos cubos, es que los ilumina desde el interior, creando así contrastes con luces y sombras.
Anila Quayyum Agha nació y se crió en Lahore, Pakistán, pero ha vivido en los Estados Unidos durante más de 20 años, yendo de Texas a Indiana y, más recientemente, a Georgia, donde da clases en la Universidad de Augusta.
Recientemente su trabajo ha cobrado mayor importancia por lo potente que resultan sus mensajes, pero también por la hermosa forma en que lo hace.
De acuerdo con la propia artista, sus instalaciones se centran en dar voz a los migrantes y mujeres pues son ellos a quienes se ha tratado de invisibilizar a toda costa en diversas partes del mundo, pero especialmente en los Estados Unidos.
Debido a que viene de la cultura del Este, los patrones siempre han formado parte importante de su vida. Por eso fue que optó su trabajo artístico para cambiar la idea de que solo las mujeres están asociadas con los patrones por ser delicados.
El trabajo de esta se alimenta de pequeños momentos de su vida diaria y precisamente por eso es que juega con las luces y las sombras, pues para ella no hay nada más divertido que salir a caminar y ver cómo se refleja su sombra en el suelo. Es algo que la hipnotiza y esto es lo que quería provocar en el espectador.
A través de armoniosas y hermosas instalaciones es como Anila Quayyum Agha busca llevar a la reflexión a las personas, pues sabe que con la realidad que todos vivimos a diario es más que suficiente.