Artistas que actualmente gozan de una gran fama como Vincent Van Gogh, Claude Monet, Johann Sebastia Bach, Franz Kafka y Edgar Allan Poe rara vez fueron apreciados en su tiempo, lo que resulta lamentable.
Muchos de estos artistas eran grandes excéntricos que lidiaban con adicciones, dolencias físicas, enfermedades mentales y alcoholismo, por lo que sus vidas y muertes fueron verdaderamente oscuras.
Es posible que en vida hayan vendido parte de su obra, pero pocos, realmente pocos, alcanzaron el nivel de fama que algunos de ellos lograron después de la muerte. Rara vez podían mantenerse a sí mismos y mucho menos a una familia.
La mayoría de los artistas en esta lista introdujeron algo nuevo y no estuvieron exentos de controversia en torno a ellos y su trabajo, lo que los hizo tan geniales. Lamentablemente, los cinco artistas que conforman esta lista murieron en la pobreza y en una relativa oscuridad, por lo que vale la pena conocer un poco más sobre ellos.
Vincent Van Gogh
Vincent Van Gogh solo vendió una pintura durante su vida por el equivalente a aproximadamente $109 dólares, así que definitivamente de su arte no pudo vivir.
Aunque es famoso por obras como La noche estrellada, este artista luchó contra enfermedades mentales la mayor parte de su vida.
Desafortunadamente no pudo con dicha batalla y en 1888 se cortó una de sus orejas. Poco tiempo después, mientras paseaba por el campo, se disparó en el pecho con un revólver, pero decidió volver a la pensión en la que vivía y tan solo dos días después, en brazos de su hermano Theo, murió.
Self-Portrait with Straw Hat, 1887. Vincent van Gogh. Fuente: Van Gogh Museum, Amsterdam
Claude Monet
Uno de los artistas que tuvo una de las vidas más trágicas fue el fundador del impresionismo francés: Claude Monet. Debido a esto, Monet y su familia experimentaron la pobreza extrema durante gran parte de sus vidas.
La forma y la técnica que desarrolló crearon una sensación de luz atmosférica con sus representaciones de escenas de paisajes en un momento particular. Este decía que un paisaje no existía por sí mismo debido a que su apariencia cambia a cada momento; el entorno, la atmósfera circundante, es lo que a la obra le da vida.
Su obra seminal Impression, Sunrise acuñó la nueva escuela, pero no fue hasta 1880 que sus obras comenzaron a venderse, casi una década después de haber creado sus mejores obras.
Gozó de algo de fama en vida, pero también muchos pintores lo acusaron de solo importarle la comercialización de sus obras. La tragedia lo persiguió hasta el final de sus días ya que quedó, parcialmente ciego, lo que impidió que siguiera pintando con la misma destreza que en sus mejores años.
Self Portrait with a Beret, 1886. Claude Monet. Fuente: Monet Paintings Website
Johann Sebastian Bach
A lo largo de su vida Johann Sebastian Bach gozó de gran éxito como organista y clavecinista, pero sus obras como compositor fueron ampliamente ignoradas.
Resulta que este murió siendo reconocido como tal, pero no fue hasta principios del siglo XIX, cuando resurgió el interés por el periodo barroco, que sus composiciones musicales finalmente salieron a la luz.
Bach logró traer elementos musicales de Italia y Francia enriqueciendo su estilo alemán. Si bien tomó algún tiempo, el trabajo de Bach ha sido escuchado en todos los rincones del planeta, que es lo que todo artista quiere.
Portrait of Johann Sebastian Bach, 1748. Elias Gottlob Haussmann. Fuente: Google Arts & Culture
Franz Kafka
Franz Kafka tenía una forma verdaderamente única de mirar y experimentar el mundo. Como muchos artistas, la escritura de Kafka fue en gran medida el resultado de sus experiencias.
Kafka tuvo una relación difícil con su padre, quien era sumamente dominante y estricto, y su madre, quien también trabajaba muchas horas, así que gran parte de su juventud se la pasó solo con sus sirvientes.
Se las arregló para tener éxito en la escuela, estudiando derecho, pero finalmente se estableció como oficial de seguros pero el pasar tantas horas trabajando no era lo suyo, así que decidió renunciar a su trabajo para tener más tiempo para escribir.
Franz Kafka murió, a los 40 años, como un completo desconocido, sin haber publicado un solo trabajo. Fue gracias a un amigo cercano que le ayudó en sus últimos días, cuando este padecía tuberculosis, que sus obras pudieron ser rescatadas y dadas a conocer al mundo.
Fotografía de Franz Kafka. Fuente: Franz Kafka Museum
Edgar Allan Poe
La naturaleza oscura de la mayoría de los cuentos y poesía de Edgar Allan Poe es verdaderamente un reflejo de su turbulenta y dolorosa vida.
Por El cuervo, uno de sus poemas más famosos y con el que empezó a darse a conocer, solo le pagaron $9 dólares, así que jamás pudo vivir cómodamente gracias a su trabajo.
Edgar Allan Poe murió después de intentos fallidos de comenzar un diario y de que sus problemas con el alcohol se hicieron completamente evidentes para quienes lo conocieron.
Este fue encontrado inconsciente en una alcantarilla de Baltimore y poco después fue declarado muerto por causas desconocidas.