A finales del siglo XIX surgió un grupo de artistas cuya preocupación giraba en torno al color y sus efectos en las obras y se hicieron llamar Les Nabis.
Estos jóvenes del ambiente artístico de París se reunían en la Academia Julian, que en ese tiempo era de las más prestigiosas y en el Café Volpini, característico por ser punto de reunión de pintores, literatos y artistas de todas las esferas.
Cuando el café les quedó pequeño, Les Nabis movió sus reuniones a casa de Paul Ranson, escritor y pintor. Sitio al que decidieron llamarle “El Templo”.
Influido por Gauguin y liderado por Paul Sérusier, el grupo integró a pintores como Odilon Redon, Puvis de Chavannes, Édouard Vuillard, Pierre Bonnard, Maurice Denis, Ker-Xavier Roussel, Félix Valloton, George Lacombe, Henri-Gabriel Ibels y el escultor Aristide Maillol.
El nombre del grupo surgió de la palabra hebrea nebiim, que significa “profeta”, de ahí, derivó la palabra nabis, haciendo referencia a que eran “el grupo profeta”, pues era la manera en la que ellos buscaban señalar que eran muy adelantados a su tiempo y con inquietudes nuevas que abrían caminos en el ámbito artístico.
Les Nabis entendían el arte como la manera subjetiva de expresar las emociones y convirtieron al color en el elemento de transmisión de determinados estados de ánimo o formas de sentir.
Les Nabis a detalle
- Se interesaron en lo exótico y lo oriental, culturas lejanas los inspiraban a crear obras nuevas.
- El ámbito burgués y doméstico predominaban en sus obras.
- Deformaban la realidad de dos maneras: la objetiva y que se apreciaba en las obras y la subjetiva que lograban gracias a la emoción que le imprimían.
- Utilizaron normalmente colores planos de gran sentido estético. La gama de los pardos a los verdes, pasando por ocres, azulados se aprecian en sus cuadros. Usaban el cartón y el papel como soporte.
- Litografías, vidrieras, grabados, dibujos para ilustrar libros, revistas y todo tipo de publicaciones los caracterizaron, todo con el fin de popularizar su movimiento y democratizar el arte.
Sus dos tendencias
Espiritual: era la más cercana a las ideas de Gauguin, más romántica. Con guiños a la Edad Media, al primitivismo y a la simplificación.
Principales figuras: Paul Sérusier y Maurice Denis
Decorativista: es la más cercana al impresionismo y las ideas de Degas. Predomina el arte oriental, las formas planas y capturan interiores burgueses íntimos como los cuartos de baño. Las iluminaciones son artificiales con enfoques cambiantes y el horror vacui (miedo al vacío), es decir, que rellenaban cualquier espacio vacío en las obras.
Principales figuras: Pierre Bonnard y Édouard Vuillard
