Gerda Taro solo vivió 26 años, pero cada uno de estos estuvieron llenos de aventuras, viajes, amor, creatividad y un gran legado fotográfico que sirvió para documentar el gran dolor de la Guerra Civil Española.
Su nombre real fue Gerta Pohorylle y nació el 1 de agosto de 1910 en Stuttgart, Alemania, en el seno de una familia burguesa de judíos de origen polaco, pero desde chica simpatizó con la ideología socialista y el movimiento obrero.
Cuando apenas tenía 19 años ella, junto con su familia se trasladaron a Leipzig, justo antes del comienzo de la era nazi en Alemania.
Gerda apoyó a los izquierdistas en lugar de a los nazis y por dicho motivo estuvo sometida a custodia protectora, aunque el mayor susto fue en 1933, cuando la detuvieron por hacer campaña contra el gobierno nazi.
Debido a lo anterior toda su familia se vio obligada a buscar residencia en otros países y acabaron separándose en distintos destinos.
Después de esto logró huir junto con una amiga a París, donde trabajó de muy diversas cosas, desde niñera hasta de secretaria en la agencia Alliance Photo.
Fue en este último trabajo donde descubrió su verdadera vocación y a su gran amor, un judío de origen húngaro llamado André Ernő Friedman que intentaba ganarse la vida como fotógrafo. Gerda y André se enamoraron, se hicieron novios y André le enseñó a Gerda todo lo que sabía sobre fotografía.
Pero el gran giro ocurrió cuando por la falta de trabajo y el no tener dinero hicieron que a Gerda se le ocurriera inventarse un personaje llamado Robert Capa con el perfil de ser un afamado fotógrafo llegado de Estados Unidos para trabajar en Europa.
Debido a que era tan famoso, decidieron que vendería sus fotos a través de sus representantes, que serían ellos: Friedman y Pohorylle, pero al triple del precio que un fotógrafo francés.
Por increíble que parezca, el plan funcionó y en muy poco tiempo recibieron muchísimos encargos, con lo que empezaron a hacer dinero. André Ernő Friedman y Gerta Pohorylle, quien decidió utilizar Gerda Taro como seudónimo por su ortografía básica, capturaron las imágenes que hacían pasar de Robert Capa.
Con el inicio de la Guerra Civil española en 1936, esta pareja decidió trasladarse a aquel país para consolidar la reputación de Robert Capa y hacer, en la medida de lo posible, fortuna.
Ambos fueron testigos de diferentes episodios de la guerra y realizaron reportajes que luego eran reproducidos en publicaciones como Regards, Vu y Ce Soir.
El gran problema vino cuando Gerda rechazó la propuesta de matrimonio de André en 1937, pues literalmente se distanciaron y desde dicho momento continuaron sus carreras de forma independiente y el segundo se quedó con el nombre de Robert Capa.
Gerda Taro llevó a cabo una gran cantidad de fotografías de la Guerra Civil, donde perdió la vida en un accidente durante el repliegue del ejército pero su legado, afortunadamente, continúa hasta el día de hoy dando testimonio de su extraordinario talento.