Relojes de pulsera, de mesa y hasta cucús forman parte de la exhibición Diseño a toda hora / Design around the clock, la cual fue montada en el Museo Franz Mayer para mostrar las tendencias actuales de diseño e innovaciones tecnológicas desarrolladas en la alta relojería.
Dicha muestra se lleva a cabo en el marco de los 75 años de relaciones diplomáticas entre Suiza y México, lo que resulta sorprendente ya que además de mostrar la funcionalidad de cada una de estas impresionantes máquinas también concentra siglos de investigación científica, sorprendentes innovaciones tecnológicas y la infinita capacidad creativa de los diseñadores participantes.
La exhibición está compuesta por 26 obras de relojería elaboradas por estudiantes y graduados de la Universidad de Arte y Diseño de Ginebra, Suiza, (HEAD – Genève), poseedora de la única cátedra especializada en diseño de relojería en el mundo. La cátedra ofrece una carrera universitaria, con duración de 3 años, y una maestría, de 2 años, en la que brindan formación integral a los futuros profesionales de la horología.
La exposición también incluye relojes de la colección de la escuela como la sección de cucús, los cuales son reinterpretaciones modernas del emblemático reloj de pared dotado de autómatas y cajas de música, tan asociado con los suizos.
Parte del proceso de diseño de los relojes exhibidos se da en colaboración con prestigiosas firmas de relojería como Baume & Mercier, Tissot, Hysek o Laurent Ferrier. En estos casos, los jóvenes diseñadores reinterpretaron icónicos modelos de relojería desde una visión crítica de los requerimientos técnicos y estéticos de cada marca.
Por otro lado, en algunos de los prototipos presentados es evidente que la preocupación del diseño va más allá de los aspectos técnicos para adentrase en problemas de concepciones como la feminización, a través de diseños que rompen los tradicionales modelos de relojería para mujeres y la ecología, con el uso de materiales reciclados, como las redes de pesca para un modelo destinado al uso subacuático.
La complejidad técnica, la sofisticación de diseño y el refinamiento artístico de cada pieza expuesta permitirán al público apreciar la relojería como parte del legado cultural de nuestro tiempo, cualidades que Franz Mayer valoró en los relojes históricos que forman parte de su colección y que hoy alberga el museo. Es así como esta exposición crea diálogos entre arte y ciencia, pasado y presente, tradición e innovación.