Michelangelo Merisi da Caravaggio (1571-1610) conocido como Caravaggio, fue un pintor italiano cuya pintura destacó por mostrar una figura realista humana, a nivel físico y personal, con el uso dramático de la luz.
Obras de artistas renacentistas como Miguel Ángel Buonarroti y Giorgione influenciaron la formación del estilo de Caravaggio.
El artista italiano buscaba que sus obras no dejaran indiferentes a los espectadores; rechazó el ideal de belleza que se planteaba en el Renacimiento y eligió plasmar cosas y personas a su imagen y semejanza.
Entre 1592 y 1606 trabajó en Roma y comenzó a destacar por los detalles realistas de su obras.
Los jugadores de cartas (1594) fue considerada como su primera obra maestra.
Caravaggio fue comisionado para ilustrar diversos templos y las obras que surgieron de esta etapa catapultaron su fama.
El tenebrismo comenzó a tomar protagonismo en sus trabajos, los claroscuros y un realismo barroco muy emocional marcaron las pinturas del italiano.
Caravaggio tenía una forma explícita de representar el dramatismo, que en ocasiones fue señalada como vulgar.
Conocido por su carácter fuerte y explosivo, Caravaggio se vio envuelto en peleas en diversas ocasiones. En 1606, mató a un hombre en una riña y se vio obligado a huir de Roma.
Con una orden de aprehensión en su contra, huyó a Nápoles donde, bajo la protección de los Colonna, realizó Siete obras de misericordia y la Madonna del Rosario, entre otras.
Más tarde marchó a Malta, ahí realizó trabajos como La decapitación de San Juan Bautista, única obra que lleva su firma, entre otros trabajos.
Su obra inspiró al naturalismo de José de Ribera y Georges de la Tour, entre otros y es considerada clave en el desarrollo histórico de la pintura europea.