Entre el mito y realidad de una mujer libre: Coco Chanel
Cuando uno escucha el nombre de Coco Chanel viene a la mente marca, estilo y elegancia, pero ¿qué había más allá? ¿Quién era aquella mujer?
Te contamos algunos datos que quizá no conocías sobre una de las mujeres más nombradas en la historia:
Gabrielle Chanel nació en Francia el 19 de agosto de 1883, su madre fue campesina y su padre comerciante.
Alrededor de los 11 o 12 años quedo huérfana y su padre la ingresó a un monasterio, lugar en el que permanecería hasta los 18. Ahí aprendió a bordar y coser.
Sin embargo, ella nunca aceptaría su infancia en aquellas condiciones, además siempre afirmó que había nacido en 1893.
Trabajó durante algún tiempo en un café llamado La Rotonde en donde cantaba, dicen que en ese momento ella adoptó el sobrenombre de Coco.
Comenzó diseñando sombreros y abrió su primera tienda en 1913 en París, la aceptación y prestigio vinieron por lo que despegó rápidamente.
El negro en aquel momento era un color para funerales y en pocas ocasiones se utilizaba. Ella introdujo y popularizó el little black dress que, actualmente una gran mayoría de mujeres posee en su armario.
Versátil y sofisticado se mantiene como una prenda básica hasta hoy.
Para 1921 lanza su primer perfume Chanel No 5, sería la primera fragancia que llevaría el nombre de un diseñador.
Mientras que la empresaria pondría el 5, ya que lo consideraba su numero favorito y de suerte. Un dato curioso es que es el más vendido en la historia.
Aficionada al deporte deseaba ropa cómoda y sofisticada, así que dejo atrás los corsés o la ropa ajustada. Fue una de las primeras en portar pantalones.
Incluso se le reconoce el diseñar trajes sastres femeninos.
Perfeccionista y determinada también puso de moda el cabello corto para las mujeres.
Tuvo distintos amoríos, aunque nunca se casó.
Nunca se comprobó, pero la acusaron de informante nazi ya que sostuvo un romance con el oficial alemán Hans Günther Von Dincklage.
Uno de las relaciones más intensas que se le conocieron fue con el músico Igor Stravinsky.
Lo últimos 30 años vivió en el Hotel Ritz, hasta el 10 de enero de 1971, fecha de su muerte.
Cuentan que las últimas palabras que pronunció fue hacia su asistente Celine y dijo: "Ves, así es como mueres".
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