La Asociación Orto Botánica Corsini está de estreno con Endgame, una exhibición de intervenciones esculturales, localizadas en el Jardín Botánico Corsini en Porto Ercole, Italia.
Elaborado por Luis Corsini en colaboración con Massimo Mininni, la muestra hace alusión a Samuel Beckett y su obra de 1957, en el cual el protagonista lamenta el estado de su vida --lo que hubiera sido, lo que hubiera podido ser, cómo le hubiera gustado que fuera su final--. Aunque el título, también es un comentario de lo intrínseca y lo compleja que es relación entre el hombre y la naturaleza.
En los años recientes en los que hemos estado en casa por la pandemia del Covid-19, la relación con la Tierra ha dejado de ser ignorada. Hasta que salgamos de la cuarentena estamos expuestos a las implicaciones positivas de vivir lentamente una vida, de viajes tranquilos, climas relajados y aguas limpias.
La pandemia, como todos sabemos, es muy triste. Nosotros los humanos dependemos de la naturaleza y nos alimentamos de ella. De un modo nos nutrimos y vivimos de ella, pese a que a veces cambiamos lo natural por lo superficial, la inspiración por la supervivencia.
Es por ello que Endgame adopta hasta el 30 de septiembre, el ritmo de conciencia, y preservarvación de la Tierra, permaneciendo así, unidos a la naturaleza.
La colaboración es el corazón de éste proyecto, con pláticas entre el hombre y la naturaleza, del artista con el medio. Un muy buen diálogo entre Esteban Fuentes de María, Carlos García, Fernando Ocaña y Bosco Sodi, de México.
A estos artistas se suman Agnes, Federica di Carlo, Desideria Corsini, Henryk Corsini, Luia Corsini, Marzia Gandini, Charlie Masson, Pietro Pasolini, Malù dalla Piccola, Benedetto Pietromarchi, Annie Rattie Tristano di Robilant, Baldassare Ruspoli y Alessandro Twombly, de Italia. así como Stijn Cole de Bélgica; y Sol Bailey Barker y David Worthington de Reino Unido, quienes revelan la mirada con la que el hombre percive su relación con la Tierra.
Mientras Luia Corsini y Ocaña abandonan el jardín y los elementos para activar sus trabajos, Sodi introduce su tierra natal con pilas de arcilla de origen oaxaqueño en el paisaje mediterráneo.
De manera similar, Alessandro Twombly trabaja con arcilla, en un acto de conciencia. Tristano di Robilant, por su parte, interpreta Endgame a través de una lente nostálgica; mientras que la escultura arquitectónica de Shade Shelter, ofrece una oportunidad para la contemplación tranquila.
Este diverso grupo de artistas se involucra en una especie de juego de ajedrez mientras responden a Endgame de una manera que refleja la variedad de sus antecedentes. Habiendo desarrollado sus prácticas en continentes separados, estos artistas se reúnen en Porto Ercole, unidos por su compromiso de explorar el momento excepcional y el cruce en el que nos encontramos hoy.