El arte de Nick Cave resulta glorioso y abarca una inimaginable cantidad de disciplinas ya que este, a lo largo de más de cuatro décadas de trabajo, ha podido crear de todo, lo que incluye piezas de vestuario, pinturas, esculturas, instalaciones y videos.
Nacido en Missouri en 1959, pero radicado en Chicago desde finales de la década de 1980, Cave es toda una institución en la escena artística local, pero también internacional, por lo que Forothermore, retrospectiva que actualmente alberga el Museo de Arte Contemporáneo de Chicago (MCA) resulta especialmente significativa para él y su ciudad.
Su trabajo, que a menudo incorpora objetos encontrados, elevándolos a un estado casi sagrado, extrapola con sensibilidad temas relacionados con la experiencia humana, ocupando un lugar preponderante la injusticia racial e identidad.
Las piezas a las que ha dado vida Nick Cave resultan realmente seductoras debido a que atraen y que confrontan con verdades contundentes, lo que brinda una extraña sensación de alegría.
En un mundo tan obsesionado con siempre mostrar la mejor cara, el trabajo de Cave y la energía que cada una de sus obras emanan dan la impresión que este artista siempre está preocupado por los demás y por mejorar todo lo que le rodea.
A través del arte, Nick Cave ha encontrado la forma de sobrevivir a su propio dolor y a las pérdidas que ha sufrido, además de poder disfrutar del presente.
Para Cave hacer arte es su salida, es donde puede dirigir su ira y frustración, además de abordar temas que resultan álgidos e inapropiados en otras circunstancias.
Esta sorprendente muestra, curada en su totalidad por Naomi Beckwith, permanecerá abierta al público hasta el 2 de octubre, así que si te organizas para viajar a la ciudad de Chicago podrías llegar a disfrutar de ella.