Su Hanchen nació en 1101 en Kaifeng, China, y se especializó en pintar figuras budistas y taoístas, por lo que se convirtió en un confiable aliado de varias figuras de poder a lo largo de la Dinastía Song.
Si la historia de la pintura china se puede comparar a una sinfonía, los estilos de Su Hanchen serían parte del grupo de cuerdas o cualquiera de los otros tres grupos principales, ya que su formación imperial y la tutoría que le dío el emperador Hui Zong que lo elevó a un alto cargo, su especialización en diversas tradiciones lo convierte uno de los maestros infantables de la pintura china.
Dado el apoyo real que tuvo, pero también sus fascinantes técnica, gran capacidad de observación y análisis de la figura humana, Su se convirtió en maestro de los niños de las figuras imperiales.
Los avances y felicidad que mostraban los infantes llevó a Su a cumplir su puesto a lo largo de toda China, o bien, de todos los territorios que pertenecieran al octavo emperador de la Dinastía Song.
A lo largo y a lo ancho de la dinastía reinante, fue elogiado por sus pinuras budistas, ganándose incluso el título de Caballero de confianza de las autoridades de la época, lo que le abrió infinidad de puertas en galerías, museos y exposiciones de la época, abriendo también las puertas a los futuros museos nacionales de China, donde hasta la fecha siguen colgados sus lienzos.
Cabe mencionar que el artista no cobró dinero por sus trabajos o la muestra de los mismos ya que estar bajo la ala de los emperadores, no le hacía falta ninguna necesidad, aunque se le consideró un maestro austerio que vivía para pintar y educar en materia de la observación y la descripción, métodos con los que logró algunas de sus pinturas más notables.
En un momento en que algunos artistas chinos rechazaban los estilos de pintura tradicionales en favor de estilos de influencia occidental, Su defendió los modelos tradicionales a partir de su propio arte literario. Sus pinturas solían incluír meditación y concentración para ser completadas en una sola sesión y con una sola tinta.
Mientras los realizados de pintores de paisajes como Fan Kuan, Guo Xi, y Li Tang creaban sus modales basados en tradiciones anteriores, las composiciones sencillas, libres y espontáneas que logró Su, normalmente realizadas en la intimidad e igualmente contempladas en soledad, guiadas por el gusto de los emperadores, lo establecieron como el pintor más renombrado del género de retratos naturales y del “sentimiento poético” de le época,
Hasta la fecha, las pinturas de Su Hanchen son reconocidas como estandartes dada su dificultad y aptitud para reflejar estados de naturalidad envidiables para los maestros de la pintura china.
Murió el 1161 en Hangzhou, China.