Robin Page fue un músico y artista que perteneció a la corriente Fluxus. Page se caracterizó por buscar a los nuevos talentos artísticos más allá de las aulas de las universidades.
La corriente Fluxus fue un movimiento que surgió en la década de los 60 que veía a la vida misma como arte. John Cage, Wolf Vostell y Nam June Paik, entre otros fueron, parte del flujo.
Robin Frederick Page nació en Inglaterra pero vivió en Estados Unidos y Canadá por los trabajos de su padre, un caricaturista. En Vancouver estudió arte, golpeó a un profesor en la universidad y comenzó a formarse una imagen “hipster Beatnik”.
Viajó por Estados Unidos y Canadá, hasta que se instaló por un tiempo prolongado en París donde conoció de cerca la corriente Fluxus.
En su etapa de juventud, Page se dedicó a la música rock. En 1962, mientras realizaba un concierto en Londres tomó su guitarra y la azotó contra el escenario varias veces hasta quedar en pedazos. Acto que se convirtió en leyenda.
Page fue un nómada del arte porque sí. A pesar de sus amplios estudios en escuelas de arte de prestigio, el autor siempre tuvo problemas para relacionarse y establecerse. Siempre lo acompañó un halo de frustración artística, sin embargo, supo impulsar a sus alumnos en el camino del arte.
El profesor fue innovador en las nuevas formas artísticas de expresión y tenía buen ojo para los nuevos talentos artísticos. Buscó a sus estudiantes entre los punks creativos, grafiteros, artistas informáticos y callejeros.
En la década de los 80, Page se pintó la barba de azul como una característica de su versión creativa. Se autodenominó “Bluebeard” y creó una serie de pinturas llamadas “Bluebeard AMuseum”.
Page realizó “To the Museum of Modern Dreams”, una pieza que representa un cuadro encajado en una caja de embalaje en cuya superficie aparecen las señas del destinatario: "Para el museo de los sueños modernos". Su trabajo se exhibió en galerías como aKonzept Krinzinger y en museos.
Robin Page murió en 2015 a la edad de 82 años.