Rembrandt Harmenszoon van Rijn (1606-1669) conocido simplemente como Rembrandt, fue un pintor y grabador holandés.
Considerado uno de los mayores maestros barrocos de la pintura y el grabado, su aportación a la pintura coincide con lo que los historiadores llaman la edad de oro holandesa.
Alcanzó el éxito durante su juventud y entre sus mayores logros creativos destacan los retratos que realizó para sus contemporáneos, sus autorretratos y sus ilustraciones de escenas bíblicas.
Durante veinte años se convirtió en el maestro de prácticamente todos los pintores holandeses.
Sus primeras obras, como La lapidación de San Esteban, manifiestan una fuerte influencia de Pieter Lastman, quien fungió como su maestro entre 1625 y 1631.
Durante su primer periodo en Ámsterdam (1632-1636), Rembrandt comenzó a pintar escenas bíblicas y mitológicas de carácter dramático, obras como Sansón cegado por los filisteos (1636) y La fiesta de Belshazzar (1635) surgen en esta época.
A partir de 1640, Rembrandt fue eliminando los rasgos más pintorescos de su estilo y se volvió más sombrío al pintar.
En 1642 realizó La ronda de noche, su mayor obra y el encargo de retrato colectivo más importante de ese periodo.
Más adelante, sus pinturas adoptaron diversidad de tamaños, técnicas y estilos.
Hacia 1650, el estilo de Rembrandt regresó a los grandes formatos, los colores se vuelven más intensos y las pinceladas más pronunciadas.
En 1652 comenzó una serie de autorretratos impregnados de reflexión, hasta el año de su muerte realizó 15 versiones de este tema, así como numerosas y emotivas imágenes de hombres y mujeres enamorados, La novia judía (1666) es uno de estos.