El mundo del arte está de luto. Vicente Rojo, un pilar de la Generación de la Ruptura, movimiento pictórico que cimbró al arte mexicano, falleció a sus 89 años.
Rojo, nacido en España, hizo sus primeros estudios de dibujo, cerámica y escultura en 1946, en la Escuela Elemental del Trabajo.
En 1949, el artista llegó a México para hacer de este país su patria.
Además de haber sido artista plástico y escultor, también fue diseñador gráfico.
A partir de 1953 colaboró en el diseño de la revista Artes de México, así como en otras publicaciones, como México en la Cultura y La cultura en México.
A lo largo de su carrera, Vicente Rojo llevó a cabo numerosas exposiciones individuales y participó en incontables muestras colectivas en todo el mundo en recintos como el Museo Nacional Reina Sofía, el Museo de Arte Moderno, la Biblioteca Nacional de Madrid, el Museo de Arte Carrillo Gil y la Universidad de Texas.
Su pintura se puede agrupar en cinco series principales: Señales, donde trabajó con formas geométricas básicas; Negaciones, surgida de su intención de que cada cuadro negara al anterior y al que le seguiría; Recuerdos, nacida de su intento de abandonar una infancia difícil; México bajo la lluvia, concebida un día que vio llover en Tonantzintla, y Escenarios, compuesta de miniseries y que es un repaso de sus temas anteriores y una suma de los mismos.
Algunos de los reconocimientos que Vicente Rojo recibió fueron el Premio Nacional de Ciencias y Artes, el Premio México de Diseño, la Medalla al Mérito en las Bellas Artes (España), además de que recibió del gobierno español la Condecoración de la Encomienda de la Orden de Isabel La Católica y del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA) la Medalla Bellas Artes, por su vasta práctica dentro de las artes visuales.