Las pinturas del artista estadounidense, Shawn Huckins, fusionan lo tradicional con lo contemporáneo, lo cual las hace divertidas y atractivas.
Sus intensos colores y meticulosos retratos hechos a mano, ofrecen un toque de humor y reflexión a los espectadores.
En el caso de su serie Dirty Laundry, Huckins muestra la relación de los seres humanos con la tela, la cual es fundamental y primaria, pues desde que nacemos somos envueltos en ella.
Huckins, reflexiona sobre este material, señalando que es la primera experiencia de tacto y comodidad, además de que ofrece un sentimiento de consuelo y protección o de no querer ser visto.
“Usamos la tela para disimular, pero también para expresarnos, selectivamente , en función de cómo nos vemos y cómo queremos que nos vean los demás”.
De este modo, el artista de 38 años, plantea obras donde mujeres y hombres tradicionales, se encuentran envueltos en telas contemporáneas de diferentes colores y estampados, asegurando que todos tenemos ropa sucia de manera literal y figurativa.

Sus recreaciones de obras históricas pintadas a mano, dejan ver telas audaces, brillantes y coloridas que cubren todo o partes significativas del retrato.
Es así como los espectadores obtienen pocas pistas sobre los modelos, pero con unos detalles tan minuciosos que pueden revelar la verdad.
Y es que Huckins, expone esta reflexión, señalando que todos tenemos escondites y que incluso, a veces intentamos ocultarnos de nosotros mismos o de los demás.
Los retratos, paisajes y escenas pastorales de este creativo, provienen de registros de dominio público y colecciones de museos de pinturas americanas clásicas.
Su trabajo se ha expuesto tanto en colecciones privadas como públicas en todo Estados Unidos, además de que ha aparecido en diversos medios digitales como Forbes , Juxtapoz, Hi-Fructose Magazine , Huffington Post , New American Paintings , The Jealous Curator y The Advocate.
Huckins, que estudió en Keene State College en New Hampshire y en la Universidad de Wollongong en Australia.
