Para crear sus transgresoras obras, Tomás Saraceno, el artista argentino que cuenta con más proyección y reconocimiento mundial actualmente, fusiona arte y ciencia.
El creador ofrece en cada uno de sus performances e instalaciones respuestas a problemas que se presentan a nivel global.
Son las preguntas apremiantes de nuestro tiempo las que ocupan a Saraceno: ¿cómo vivir en mayor armonía con la naturaleza?, ¿cómo conservar los recursos naturales y desarrollar formas alternativas de vida y soluciones de movilidad? y ¿qué rol puede jugar en esto el arte?
El artista argentino concibe su trabajo como una respuesta a los desafíos globales: diseña ciudades que flotan sobre las nubes e investiga una aeronáutica que prescinda de combustibles fósiles y, por tanto, más respetuosa con el medio ambiente.
![Imagen Imagen dentro del contenido](https://fahrenheitmagazine.b-cdn.net/sites/default/files/inside-the-note/pictures/2021/09/22/saraceno_portada_2.jpg)
Tomás Saraceno también ha tejido gigantescas telas de araña por las que los visitantes pueden deambular a su gusto.
Con cada una de sus innovadoras piezas, el artista, de 48 años, transgrede límites y ensaya nuevas formas de comunicación y solidaridad.
Desde sus inicios, la carrera de Saraceno ha transcurrido entre el arte y la ciencia lo que le hizo destacar del resto.
Nació en 1973 en Argentina, donde estudió arte y arquitectura. En 2001 ingresó con una beca en la Städelschule de Frankfurt, Alemania, y luego decidió quedarse a vivir y trabajar en Berlín donde el mundo entero ha podido observar sus transgresoras propuestas.
![Imagen Imagen dentro del contenido](https://fahrenheitmagazine.b-cdn.net/sites/default/files/inside-the-note/pictures/2021/09/22/saraceno_portada_3.jpg)