Un boceto que estuvo olvidado durante un siglo en un rincón del Museo Bredius, en La Haya, Países Bajos, pertenece a Rembrandt.
El levantamiento de la Cruz, que data de 1640, fue considerado por años, como una imitación del maestro neerlandés.
Sin embargo, un reciente estudio señala que la obra efectivamente pertenece al autor de La ronda de noche y La lección de anatomía.
La restauradora Johanneke Verhave y el experto en arte Jeroen Giltaij, fueron quienes realizaron el hallazgo y que para ojos de Giltaij, “los golpes de pincel son brillantes”.
Tras la restauración, el Museo Bredius se puso en contacto con el Rijksmuseum de Ámsterdam, que alberga La ronda de noche, en donde los expertos también examinaron el cuadro determinando que efectivamente la obra es de Rembrandt.
El boceto que por años se creyó era una copia burda de Rembrandt, fue comprada en 1921 por el primer conservador del museo de La Haya, Abraham Bredius, quien estaba convencido de que se trataba de un original.
Pero con el tiempo, los expertos descartaron dicha posibilidad hasta ahora que de nuevo se examinó.
Algunos de los detalles que arrojaron los estudios, son que el cuadro no fue copiado y que incluso hubo varios cambios antes de su proceso final, lo que significa que fue una composición completamente creativa.
Los escaneos de rayos X y reflectografía infrarroja, también mostraron que la forma en la que el autor manejaba su pincel coincidía con la del maestro del barroco.
El levantamiento de la Cruz tiene muchos parecidos a La ascensión de la cruz, que se expone en el museo Alte Pinakothek en Múnich, Alemania, por lo que cada vez son más los detalles que han determinado que el cuadro efectivamente corresponde al maestro barroco.
