Si echamos un vistazo a las últimas décadas de la historia del cine japonés, encontraremos algunas de las mejores y peores películas conocidas por la humanidad.
Si bien hay asombrosas y mundialmente famosas películas como HANA-BI de Takeshi Kitano o los muchos títulos de Ghibli de Hayao Miyazaki, también hay muchos filmes cursis y mal filmadas que la gente solo ve por los actores famosos o atractivos con los que cuenta, lo que hace que el espectro cinematográfico de Japón sea posiblemente el más amplio en el mundo.
La película de la que estamos a punto de hablar hoy ocupa un lugar realmente especial debido a que fue dirigida por el legendario Takashi Miike y se trata nada más y nada menos que de Sukiyaki Western Django.
Este filme es especial en muchos sentidos. En primer lugar, está dirigido por Miike para que sepas que será una joya. En segundo lugar, posiblemente tenga el elenco más sorprendente hasta el día de hoy en Japón, con las leyendas Hideaki Ito, Koichi Sato y Kaori Momoi siendo solo la punta del iceberg.
En tercer lugar, Quentin Tarantino está en la película, quien es un gran admirador de Miike.
Cuarto, la historia es realmente cursi. Y en quinto lugar resulta que están los samuráis-vaqueros que lanzan armas. Pero si lo anterior no fue suficiente resulta que la película está hablada, en su totalidad, en un inglés extremadamente extraño pero que cuenta con un gran mérito debido a que el elenco japonés aprendió todas sus líneas en dicho idioma.
Si lo anterior no hace que te den ganas de ver instantáneamente esta legendaria película, algo definitivamente anda mal.
El famoso Quentin Tarantino incluso ha dicho que trabajar en esta película fue un sueño hecho realidad, tanto, que 5 años después se animó a dirigir Django Unchained.
La historia en sí, como sugiere su nombre (Sukiyaki Western), es la versión de Takashi Miike de un spaghetti western.
El estilo de la película es claramente una película occidental, pero su trama incorpora muchas referencias japonesas históricas, como Genji y Heike, dos clanes importantes en el 1100, al tiempo que mezcla temas occidentales modernos como pistoleros.
Y lo que resulta más genial es que esta película no está hecha para analizar la historia, sino para disfrutarse, gozarse y pasar un muy buen rato.
Si bien la trama también resulta interesante, Sukiyaki Western Django es más un viaje visual en el que simplemente te sumerges y aceptas lo que está sucediendo frente a ti.