Berthe Morisot, la artista precursora del impresionismo
Berthe Marie Pauline Morisot fue la primera mujer impresionista y su obra es sumamente relevante para la historia del arte.
Nació en Bourges, Francia en el seno de una familia acomodada.
Desde pequeña dio indicios sobre el talento que a lo largo de su vida desarrollaría.
Su familia se trasladó a París cuando ella tenía 11 años, lo que le permitió ingresar a un mundo en el que florecían las formas de expresión.
Formó parte de un círculo de intelectuales y artistas de la época.
Su figura fue fundamental, la comprensión sobre pintura y delicadeza que imprimió a sus piezas fue notable. Falleció el 2 de marzo de 1895.
Relevancia de Morisot
A la hora de pintar su soltura era completamente natural.
Para aquel momento sus trazos eran experimentales e innovadores en todo sentido, digna predecesora del arte moderno.
Se destacó por sus pinturas al óleo, pero también exploró el dibujo y escultura.
No se sabe con certeza la grandeza de su producción ya que muchas de sus obras fueron destruidas por ella misma cuando no le convencían por completo.
En 1874 se realizó su primera exposición individual.
Femenina, gustaba de utilizar los colores pastel y trabajar al aire libre.
Captó con gracia y maestría el movimiento y luz en la mayor parte de sus cuadros.
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