Minsk cura las heridas de la Segunda Guerra Mundial con esta instalación
Clap Studio y Wei Lesley realizaron un proyecto sumamente sensible.
A través de una instalación, conmemoraron un sitio destruido por la guerra, Minsk, capital de Bielorrusia durante la Segunda Guerra Mundial.
Fue así como esta cuidad sufrió el 80 por ciento de la destrucción de su territorio por los bombardeos.
Y no fue sino hasta la década de los 50 que comenzó a levantarse de nuevo.
Es por ello que este trabajo conmemora y rinde tributo a aquellos fallecidos en la guerra.
Pero también con un recordatorio de que la historia sirve para no repetir hechos tan terribles como el mencionado.
Su diseño blanco desea ser conceptual y sencillo para que las personas se reúnan y encuentren paz.
Dicha instalación cuenta con volumen geométrico, por lo que invita a interactuar con el espacio.
Construida por voluntarios locales que enviaron un mensaje claro a la sociedad posee un detalle entrañable.
Dentro de un resquicio se alza un árbol, que busca significar como la vida volvió, después de un episodio tan turbulento.
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