Apenas a una hora de Marsella se encuentra Arlés, uno de los rincones más hermosos de la Provenza francesa.
Sitio de inspiración para pintores impresionistas y vanguardistas, este lugar ha quedado inmortalizado en obras por la belleza de sus paisajes y el colorido de sus calles.
Reconocida por su gastronomía y por sus impresionantes campos de lavanda, Arlés destaca también por su anfiteatro y circo romano, patrimonio histórico que vale la pena conocer.
Arlés fue centro comercial griego, colonia romana y capital del Imperio.
Otro plus de esta ciudad francesa es que formó parte importante de la vida de Van Gogh, quien vivió ahí y creó 300 obras en la célebre Casa Amarilla en la que habitó.
Por si fuera poco, Arlés cuenta con excelentes propuestas de hospedaje, una de estas es el Hôtel du Cloître, uno de los hoteles boutique más impresionantes y cuyo diseño corrió a cargo de India Mahdavi.
Los suelos de terracota conjugan con una explosión de llamativas tonalidades, características del estilo de la diseñadora iraní, quien es conocida como la “reina del color”.
Los espacios están decorados en verde turquesa y hacen perfecto juego con los detalles antiguos del lugar, como los techos que no han sido remodelados.
El brandal de la escalera asemeja un típico mosaico árabe y le da un toque de glamour al lugar.
En las habitaciones, los huéspedes podrán disfrutar de estancias llenas de color con toques de estilo setentero.