La industria de la moda transita por una etapa de innovación, sustentabilidad y consciencia que implica la búsqueda de nuevos materiales que permitan conservar la calidad y presentación de las prendas sin causar daños medioambientales.
De este modo, adidas, Stella Mccartney, Lululemon y la empresaria matriz de Gucci, Kering, se han asociado para invertir en la producción de Mylo, un tipo de material que se obtiene a partir del micelio —conjunto de filamentos cilíndricos (denominadas hifas) que constituyen la estructura del cuerpo de los hongos—.
En dicho proceso, de acuerdo a sus descubridores, la empresa de biotecnología Bolt Threads, las células se alimentan con aserrín y otros materiales orgánicos, y se colocan en esteras de cultivo cuadradas.
Posteriormente, en un ambiente con humedad y temperatura controladas, se les permite crecer en una capa espumosa (como una gran bolsa de malvaviscos triturados) y se cosechan.
Hacia el final del proceso, esta red de micelio se convierte en una lámina de material que se asemeja al corcho pero es mucho más delgada y flexible, para luego pasar por un tratamiento de curtido y teñido elaborado por las mismas curtidurías que trabajan con cueros de animales.
Usualmente estos procedimientos involucran sustancias químicas nocivas como el cromo, que pueden provocar la contaminación de las aguas residuales y efectos en la salud de los trabajadores.
Es por ello que Jaime Bainbridge, presidente de desarrollo de productos de Bolt Threads, ha declarado que la compañía solo trabaja con empresas que han obtenido certificaciones de sostenibilidad global.
"Mylo está libre de sustancias químicas y sustancias altamente peligrosas como DMF (dimetilformamida) y cromo, algunas de las sustancias químicas más nocivas que se utilizan en el cuero animal y sintético", afirmó.
Socios por la sostenibilidad y la vanguardia
El interés de las grandes marcas de ropa y deportivas por adelantarse a la incorporación de nuevas opciones textiles en sus procesos de producción propició que se asociaran en un conglomerado, y así invertir conjuntamente en las investigaciones de Bolt Threads en torno al Mylo.
Con ello, adidas, Gucci, Lululemon y Stella McCartney podrían utilizar con mayor rapidez y antes que nadie este material.
El siguiente reto, de acuerdo a Bainbridge, es encontrar la manera de acelerar el proceso de cultivo del Mylo, y así poder producirlo en mayores cantidades.