Alebrijes, los seres fantásticos que nacieron de un sueño
Uno de los distintivos de México son los colores en sus paisajes, en su arte, en su día a día.
Y los alebrijes no son la excepción, son una artesanía que parece cobrar vida y han dado la vuelta al mundo.
Son criaturas imaginarias conformadas por distintas partes de animales, es decir, mezclas extraordinarias.
Surgen en la Ciudad de México, en el barrio de la Merced, hechos de papel, por los años 30.
Y alrededor de los 80, Oaxaca los adapta a su región y los comienza a hacer con madera de copal.
Poseen un valor incalculable ya que son piezas únicas, no hay otro igual.
Estos seres fantásticos forman parte fundamental de la cultura mexicana.
¿Qué hay detrás de los alebrijes?
Pedro Linares López fue un cartonero que nació en 1906.
Durante una enfermedad que lo dejó inconsciente, cayó en un sueño profundo.
Los remedios caseros fueron lo único a la mano para ayudarlo en el trance.
Viajó hacia un universo mágico.
Ahí vio a un burro con alas, un gallo con cuernos de toro y un león con cabeza de perro.
Quería correr, pero le señalaron que debía seguir su camino.
Al final llegó a una ventana estrecha por la cual se escabulló y de pronto despertó.
Tras este episodio decidió mostrar su alucinación y triunfó.
Incluso Diego Rivera y Frida Kahlo le encargaron los animales que creaba.
Linares murió en 1992, pero el legado queda, su familia continúa con la tradición, igual que muchos otros artesanos.
Y el mundo entero es testigo de los maravillosos alebrijes que alguna vez conoció.
