A primera vista, las imágenes que captura el polaco Paweł Bajew parecen retratos oficiales de algún tipo de obra fantástica. Los protagonistas de estos cuentan con un atractivo exagerado que despiertan la curiosidad y la imaginación de las personas en poco tiempo.
Con sede en Pulawy, Polonia, Paweł Bajew es un fotógrafo al que le gusta trabajar en escenarios oscuramente surrealistas.
Cabe destacar que su creatividad adquiere un efecto vintage debido a los filtros que le gusta utilizar en cada uno de sus proyectos. En pocas palabras, este artista lo que hace es alterar, de forma análoga, la realidad, lo que resulta fascinante.
Para Paweł Bajew la creación de la foto es similar a escribir poesía. A través de una imagen conceptual, el polaco plantea cuestiones importantes en el arte y la vida como la naturaleza de la existencia.
Bajew explicó en una entrevista que, gracias a su naturaleza polaca, posee un sentido muy concreto de la sensibilidad, la guerra y otros horrores que se han presentado a lo largo de los años, por ello no posee un proceso creativo definido, todo surge de un momento a otro en su cabeza, y la imagen puede ser literal y cruda, como la mutilación de una cabeza, o se deja llevar por el proceso artístico y la imagen se vuelve una gran alegoría que pocas personas pueden descifrar.
Las imágenes que captura, además de que suelen tener una gran carga emotiva, siempre resultan una severa crítica a la sociedad en la que vivimos hoy en día.
A estas imágenes decidió añadirles un toque de imaginación y crítica, donde Paweł no suele explicar el significado, simplemente monta la imagen y deja que el público saque sus conclusiones.
El resultado va desde imágenes agresivas, hasta composiciones fascinantes que unen varios mundos, las cuales se han hecho acreedoras de reconocimiento en todo el mundo.