La trayectoria pictórica del artista británico INSA es extensa, pero su mayor aportación al mundo del arte es su innovadora manera de hacer arte callejero digital.
Las creaciones e instalaciones hiperrealistas del diseñador son expresiones que, comúnmente, contrastan y fusionan el fetichismo de las mercancías y el deseo sexual.
Originario del Reino Unido, INSA comenzó a pintar a partir de la edad de 12 años y, desde ese entonces, su ímpetu artístico exploró varias plataformas; entre ellas, la producción de películas de terror alusivas al protagonista de Nightmare on Elm Street: Freddie Krueger.
El trabajo de INSA se distingue por la perfecta mezcla de realidad y fantasía que manifiesta en toda su obra, con la que ahonda diferentes enfoques y salidas para su agenda.
Creador del concepto GIF-ITI, con el que interviene paredes en las calles y las convierte en GIF animados, INSA ha implementado un mecanismo único en el campo de las artes visuales.
Dicho método consiste en pintar murales, fotografiarlos, repintarlos y volverlos a fotografiar para convertirlos en el formato en movimiento.
Este proceso creativo, de acuerdo a testimonios del artista, surge a partir de observar que el arte, tarde o temprano, se reduce a pixeles.